El Ayuntamiento de Badajoz acude a la misma fórmula que el año pasado para financiar inversiones en la ciudad solicitando dinero a los bancos para devolvérselo cuando liquide el presupuesto. De nuevo acaba de pedir a las entidades financieras que pongan sus ofertas sobre la mesa para pedirles dos créditos: uno por valor de 21.165.652 euros, destinado al denominado Plan de Impulso, y otro de 12.467.952 para cofinanciar proyectos presentados a convocatorias de fondos europeos.

Los bancos tienen hasta el próximo viernes, 10 diciembre, para presentar sus ofertas, según aparece en el perfil del contratante, en la web municipal. Las ofertas se valorarán atendiendo al tipo de interés más bajo y, en caso de empate, se tendrá en cuenta el menor interés de demora.

En el caso del crédito por valor de 12,4 millones de euros, si cuando se formalice el préstamo se ha resuelto alguna de las convocatorias para las que el ayuntamiento ha solicitado ayudas, solo se firmará por el importe de la cofinanciación de las actuaciones concedidas. Si aún no se sabe el resultado, la operación se firmará por el importe total y se amortizará sin ninguna penalización la cuantía de las actuaciones que no se concedan.

Para el Plan de Impulso, el ayuntamiento vuelve a acudir a un crédito para disponer de más tiempo para acometer las inversiones, pues así sortea la limitación del uso de los remanentes, que tienen que estar invertidos antes del 31 de diciembre.

El contenido de las actuaciones que se van a acometer con los 21,1 millones de euros ha sido consensuado por todos los grupos políticos municipales. Incluyen, entre otras, la adquisición de otro radar fijo más y dos cabinas, pasos de cebra inteligentes, obras en pabellones deportivos, la rehabilitación de la puerta de San Vicente, la construcción de un quiosco y baños públicos en el parque de la Legión, 1,8 millones para la estación de bombeo de San Roque, asfaltado de calles y arreglos de acerados, 1,4 millones en parques, 100.000 euros para más huertos urbanos, nuevos vehículos para los bomberos y los policías locales y la reforma de la fuente de Isabel de Portugal.