DENUNCIA DEL SINDICATO CSIF

Un "peligroso" preso australiano agrede a un funcionario de la prisión de Badajoz

El agresor, que fue detenido en septiembre acusado de abusos sexuales a una menor en su país, le propinó puños, golpes y empujones, a causa de los que sufrió heridas leves

El resto de internos se abalanzaron sobre el agresor y lograron reducirlo con ayuda de los otros dos funcionarios de servicio

Centro penitenciario de Badajoz.

Centro penitenciario de Badajoz.

EFE

Un "peligroso" preso australiano, que está pendiente de ser trasladado a su país

, ha agredido a un funcionario del Centro Penitenciario de Badajoz, que ha sufrido heridas leves, según ha denunciado este sábado el sindicato CSIF.

La agresión se produjo el viernes por la noche, cuando se procedía al reparto de la cena a los internos, después que por la tarde fuera trasladado desde un módulo de los llamados de 'respeto', cuyos perfiles permiten una convivencia más avanzada dentro del tratamiento penitenciario.

El interno, que perteneció a los cuerpos especiales de las fuerzas armadas de su país, mide 1,90 metros y pesa unos cien kilos, según Francisco Espinosa, delegado del sindicato, tiró la bandeja de la cena y se dirigió hacia uno de los dos funcionarios de "manera muy alterada, con fuertes gritos en inglés, lanzándole un puñetazo y golpeándole en el pecho, seguido de un fuerte empujón, ocasionando su caída al suelo".

En ese momento, de manera espontánea, el resto de internos reaccionó para proteger al funcionario, abalanzándose sobre el agresor e inmovilizándolo.

La participación de otros presos, junto a la inmediata actuación de los dos funcionarios de servicio en el módulo, permitió detener al interno y evacuarlo del módulo para su propia seguridad.

CSIF ha destacado la profesionalidad de los trabajadores para solucionar el incidente y "la inestimable y ejemplar" actuación de los internos del departamento a favor del funcionario.

Como a partir de las tres de la tarde del viernes ni durante todo el fin de semana no hay médico, el funcionario agredido se trasladó por su cuenta a la Clínica Clideba, ya que presentaba policontusiones y arañazos, según Espinosa, delegado de CSIF, quien ha indicado "se encuentra bien, al margen del aspecto psicólogo".

El interno que ha protagonizado la agresión es un australiano que fue detenido el pasado 15 de septiembre en la localidad pacense Valverde de Llerena mediante un gran dispositivo policial, por parte de la Unidad Técnica de Policía Judicial de la Guardia Civil, en coordinación con la Policía Federal australiana. Se encontraba huido de la justicia de Australia que le acusa de un delito de agresión sexual continuada a una menor durante tres años.

"Grave error"

CSIF ha asegurado que ni este centro es el adecuado para internos con este perfil y "menos para andar paseando" por un módulo en el que conviven internos "muy positivamente" integrados en el normal desenvolvimiento de la vida penitenciaria, lo que considera "un grave error" de clasificación interior por parte de la dirección de la prisión.

Según el sindicato, el interno agresor tampoco pudo ser asistido por ningún médico, por lo que no se le pudo aplicar el medio reglamentario de aislamiento provisional, para el que es preceptivo ser visto por un facultativo.

CISF viene denunciando desde hace mucho tiempo la situación de la sanidad penitenciaria, otro "gran déficit" de Instituciones Penitenciarias, ya que faltan médicos y enfermeros.En su opinión, esta competencia debió ser transferida a las comunidades autónomas hace años, como contempla la ley.

Otra gran carencia, también denunciada hace tiempo por CSIF, es el no reconocimiento de la condición de agentes de la autoridad a los funcionarios de prisiones, que permite a internos como éste "campar a sus anchas a lomos de la impunidad". Además, según el sindicato, hay que sumar la falta de medios materiales y humanos, ya endémicas, y la "no menos importante" falta de formación específica.