La avenida de Elvas de Badajoz sufrirá restricciones de tráfico todo el verano

Las obras de reubicación de una de las rotondas de la avenida de Elvas en Badajoz avanzan. Empezaron a mediados de febrero con un plazo de ejecución de 6 meses, pero la constructora ha solicitado el mes pasado al ayuntamiento una ampliación. Los trabajos se prolongarán al menos tres meses más, según el concejal de Vías y Obras en funciones, Carlos Urueña, quien apunta que se trata de una «obra complicada» que se tiene que acometer por fases para interferir lo menos posible en el tráfico, de manera que siempre haya carriles libres para no interrumpir nunca la circulación. Las restricciones de tráfico, que no llegará a cortarse, ya han empezado y el concejal calcula que seguirán hasta final del verano.

La nueva rotonda, situada a tan solo 70 metros de la que desaparece, se construirá por medias circunferencias y la reordenación del tráfico se adaptará a estas fases. Esta semana se han cortado los dos carriles en dirección a Portugal y se desvía a los vehículos hacia uno de los carriles del sentido contrario, que se ha habilitado para circular hacia Caya. Para ello, se ha abierto un hueco en la mediana antes de llegar a la nueva rotonda. Más adelante, cuando este tramo esté terminado, se hará lo mismo en la dirección contraria.

Además, como el ayuntamiento ya ha recepcionado las obras de urbanización de uno de los sectores de la margen izquierda de la avenida, hay viales abiertos que llegan a Decathlon que, en caso de ser necesarios, se pueden utilizar. «Vamos a intentar que afecte lo menos posible al tráfico», recalca el concejal, que señala que precisamente han esperado al verano que es cuando se reduce la circulación. «Todas las fechas son malas para hacer una obra», reconoce.

El mes de junio lo es especialmente, por la Ebau, que se celebra la próxima semana en el campus, y por la Feria de San Juan, la más problemática. Llegado el momento, Urueña apunta que existen varias vías alternativas, como la Ronda Sur, el acceso desde la autovía y  también se pueden utilizar los dos carriles abiertos en un sentido a las horas de más tráfico para ir o volver del ferial. Todo ello se tendrá que estudiar con la Policía Local.

«Es una obra enorme y difícil», incide el concejal, quien explica que no daba esa impresión inicialmente porque primero se ha estado trabajando en los espacios interiores. La dificultad de la actuación radica en que el traslado afecta a conducciones, por ahí pasa la red de saneamiento y de telecomunicaciones. Además, incluye el nuevo acceso al campus universitario y recolocar el cerramiento que se quita de la nueva ubicación de la rotonda para situarlo donde estaba la puerta. De ahí el presupuesto: 930.776 euros.

Los conductores que circulen en esta avenida se habrán percatado de que en la rotonda que va a desaparecer permanecen en pie las señales de tráfico interiores y los olivos. La idea del ayuntamiento es trasplantarlos en la nueva glorieta por una empresa especializada. La nueva rotonda será «gemela» a la actual.

La avenida de Elvas era la antigua carretera N-V. Pertenecía al Ministerio del Fomento hasta junio de 2006, cuando la traspasó al ayuntamiento. Como paso previo a la cesión, el ministerio realizó las obras de desdoblamiento (cuatro carriles) de la calzada y la reordenación de los accesos siguiendo el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU de 1997, que era el que estaba en vigor cuando se redactó el proyecto y se ejecutó la obra, que concluyó en 2004. Para entonces se estaba tramitando un nuevo plan, que se aprobó en 2007, vigente en la actualidad. El Plan General Municipal (PGM) de 2007 sitúa una de las glorietas de acceso al campus universitario desplazada respecto a la que construyó el ministerio. El problema es que la rotonda original no da acceso a los sectores en desarrollo de la margen izquierda de la avenida y el ayuntamiento tiene que reubicarla.