Dos horas de propuestas y de reproches

Todos contra Gragera

El candidato del PP en Badajoz recibe con sonrisa obligada las críticas del resto de los cabezas de lista en el debate electoral organizado por La Crónica de Badajoz

Ascensión Martínez Romasanta

Ascensión Martínez Romasanta

Una ciudadana que había seguido el debate a través de la web lo resumió en pocas palabras: «el que gobierna es el que se lleva todos los palos». Así podría resumirse el último debate antes del 28M entre candidatos a la alcaldía pacense, organizado este jueves por La Crónica de Badajoz. El todavía alcalde, candidato del PP y ex de Ciudadanos, Ignacio Gragera, recibió casi todos los reproches, buena parte heredados de la gestión de su nuevo partido, que lleva 28 años en el gobierno municipal. Pero la cita electoral dio mucho más de sí y no se limitó a las criticas, sino que todos los intervinientes tuvieron la oportunidad de desmenuzar sus programas y de posicionarse respecto a algunos de los principales problemas que preocupan a los pacenses.

El debate, que se prolongó durante dos horas, presentado por la periodista de la casa Irene Rangel, se celebró en el salón de actos de la Cámara de Comercio e Industria de Badajoz y tuvo más de 1.400 seguidores en directo en la web de La Crónica de Badajoz y el Periódico Extremadura, además de los 2.200 que pudieron verlo en la plataforma de televisión digital EXTV, donde se puede visionar hasta el domingo. Tanta expectación generó que, como si de la final de la Champions League se tratase, en la sede del PSOE retransmitieron el envite en directo a través de una gran pantalla.

Pantalla en la sede del PSOE para seguir el debate de La Crónica.

Pantalla en la sede del PSOE para seguir el debate de La Crónica. / LA CRÓNICA DE BADAJOZ

Es difícil reseñar si hubo un claro vencedor. El síntoma más claro fue que, al concluir, todos los candidatos sin excepción parecían sentirse satisfechos con sus respectivas intervenciones y la oportunidad que habían tenido de exponer sus propuestas. A dos días de la cita electoral, ninguno podía resultar estridente.

Además de las críticas a la gestión del PP, se evidenciaron ciertos roces entre el candidato de Vox, Marcelo Amarilla, y la de Unidas Podemos, Erika Cadenas, en materia de vivienda y de cambio climático, por la clara distancia ideológica que los separa. Amarilla prometió que si Vox llega al ayuntamiento podrán circular furgonetas de gasoil por el Casco Antiguo, que no será declarado zona de bajas emisiones y fue el único que sacó a la palestra el problema de los okupas. Cadenas le contestó que además del derecho a la propiedad privada existe el de la vivienda.

También asistieron el candidato del PSOE, Ricardo Cabezas, y la de Ciudadanos, Ángela Roncero, que se mostró especialmente guerrillera con su excompañero de filas, Gragera, a quien acusó de apoderarse de los logros de su anterior grupo municipal al frente del gobierno de coalición y al que acusó de traidor. Igualment Cabezas echó en cara al PP que se adueñe de las ideas de los demás partidos. Cadenas llamó a Gragera «tránsfuga», como era de esperar, pues lleva haciéndolo desde que el todavía alcalde se cambió de partido.

Momento tenso

Uno de los momentos más tensos -lo hubo- se produjo cuando los candidatos del PSOE y Unidas Podemos sacaron a relucir la tragedia ocurrida en La Luneta, donde un vecino falleció porque la escalera de la calle carecía de barandilla. «Ha muerto un hombre por su dejadez y ni siquiera ha tenido de decencia de dar el pésame a la viuda; sus políticas municipales, señor Gragera, matan», le recriminó Cadenas. El candidato popular no se quedó callado. «Voy a intentar no ser tan mezquino con acusaciones gravísimas, con la utilización de la tragedia que ha sufrido una familia», respondió. Pero no se quedó ahí, porque Cadenas volvió a sacar el tema: «Lo mezquino no es denunciar, sino mirar hacia otro nado y no poner soluciones», espetó.

Cabezas habló de iniciativas incumplidas y de presupuestos sin ejecutar y acusó a Gragera de mentir. «Le miente hasta al médico». Y el candidato del PP, al que en dos momentos del debate se le cayeron los papeles al suelo -lo que sirvió al socialista para decirle que estaba nervioso- respondió con los incumplimientos de otras administraciones gobernadas por el PSOE: el Consorcio del Casco Antiguo está pendiente de que la Junta y la diputación adopten respectivos acuerdos; si faltan viviendas sociales es porque ni el Gobierno central ni el regional las construyen y si se va a hacer un depósito de agua en Cerro Gordo es porque a la Junta se le ocurrió crear de la nada un barrio a 7 kilómetros del casco urbano.

Gragera recordó que va a insistir al presidente Fernández Vara para que Badajoz tenga un quinto puente y Cabezas le recordó que el quinto ya existe. Es el de la Ronda Sur. Sería el sexto y ya está en proyecto, según aseguró el socialista. Fue uno de los titulares que dejó el debate, como otro anuncio del candidato del PSOE: la Junta ha sacado de nuevo a licitación la obra inacabada de ampliación de la residencia de mayores de La Granadilla. La falta de plazas residenciales fue uno de los problemas que se pusieron sobre la mesa. Gragera dio cuenta de la magnitud: en Badajoz viven 8.000 mayores y solo disponen de 170 plazas públicas en residencias y, a quienes las solicitan, los mandan a Peñalsordo, a 200 kilómetros. Y cuando Cabezas habló de los proyectos empresariales que salen adelante con Avante, el popular contestó que «los mil puestos de trabajo de la Plataforma Logística son de los empresarios, no de ninguna administración».

Conflicto

En el orden del día de los problemas de la ciudad figuraba además el conflicto de la Policía Local, del que todos culparon a Gragera. Salvo Amarilla, que reconoció que desconocía el origen del asunto. Hablaron de las construcciones ilegales en Los Rostros, para las que el alcalde no pudo comprometerse a encontrar una solución aunque no cerró la puerta. Con el Carnaval, Cadenas le recriminó su falta de autocrítica y PSOE y Cs cuestionaron que en la última edición se prolongase de manera improvisada hasta diez días «con el entierro de la Sardina en medio», criticó Roncero. En otro apartado de preocupaciones ciudadanas, la candidata de la formación naranja también echó en cara al popular que antes de peatonalizar se deben crear plazas de aparcamiento «y no al revés». Gragera sonreía. No podía decir aquello de «yo no estaba entonces», aunque es cierto que solo lleva cuatro años en el ayuntamiento y no 28. Él no estaba, pero su nuevo partido, sí.

Todos los intervinientes, con el director de La Crónica de Badajoz.

Todos los intervinientes, con el director de La Crónica de Badajoz. / S. GARCÍA