La nueva sede de Badajoz permitirá atender al doble de usuarios

La Junta de Extremadura aprueba la construcción del nuevo centro de Apnaba

La obra tendrá un coste de 5,3 millones de euros y estará financiada por fondos europeos

El solar donde se construirá el nuevo edificio de Apnaba.

El solar donde se construirá el nuevo edificio de Apnaba. / S. GARCIA

Irene Rangel

Irene Rangel

Los usuarios de Apnaba están de enhorabuena. La Junta de Extremadura ha aprobado esta mañana la contratación de la obra del Centro Residencial de Apoyo Extenso para Personas con Trastorno del Espectro Autista en Badajoz. «Estamos muy contentos, era una petición que veníamos haciendo desde hace mucho tiempo porque verdaderamente hace falta, y ya está un paso más cerca de hacerse realidad», decía Román Robles, presidente de Apnaba, al ser preguntado por este periódico. 

Tras infinidad de problemas en la casi una década que la asociación lleva reclamándolo, el Consejo de Gobierno ha autorizado la contratación de la obra por un importe de 5.310.544,81 euros, unos doscientos mil euros más de lo que estaba previsto inicialmente.

El nuevo edificio será un centro «un centro pionero y de referencia regional», según aseguró ayer el portavoz de la Junta de Extremadura, Juan Antonio González, remarcando que es menester para Badajoz y para la región contar con un centro de estancias temporales para personas con diagnóstico de trastornos del espectro autista o con necesidades de apoyo conductual que «requieran intervenciones concretas para conseguir mayor estabilidad en su situación psicológica, social y mejor calidad de vida».

Robles asegura que, a día de hoy, en el centro atienden a 280 personas entre todos los servicios. «Puede parecer un número grande pero la lista de espera lo es más aún». Estas nuevas instalaciones permitirán doblar el número de beneficiarios. «No tenemos claro a cuántos daremos servicio, nosotros atendemos a los socios y a las derivaciones que nos hace el SEPAD y dependemos de las necesidades de cada momento, pero duplicaremos la cifra actual, eso seguro», afirma.

Los plazos están ahora en el aire. Robles asegura que «ni siquiera desde la propia Junta lo saben aún. Ahora hay que licitar la obra y esperar. Estoy en contacto con ellos continuamente y me consta que se hará todo a mayor brevedad posible». 

¿Cómo será el nuevo edificio?

El centro, como ya informó este diario, dará cabida a una residencia con capacidad para 36 ususarios. «Las habitaciones serán individuales porque los pacientes así lo necesitan», explica Robles. Estas plazas multiplican por tres las que actualmente existen. «Ahora contamos con 11 camas para residentes. No nos cabe ni una más. Como es lógico, hay una gran demanda y plazo de espera», afirma Robles. 

En las futuras instalaciones también estará ubicado el centro de día, así como todos los servicios que la asociación presta en su sede actual: la atención temprana, el centro educativo de educación especial - con 9 unidades concertadas para 50 alumnos cada una -, la habilitación funcional o diagnóstico, entre otros. «Lo cierto es que ‘no cabemos ni de pie’ porque, desgraciadamente, la incidencia de autismo ha aumentado bastante», dice el presidente de esta asociación. 

El diseño del nuevo edificio ya está planteado. «Se va a seguir el que ya tenemos, que nos lo hicieron hace menos de un año». Tendrá tres plantas entre las que se distribuirán todos los dormitorios de la residencia, que estarán separados en varias alas. También habrá espacio para servicios de administración, lavandería, comedor, cocina, un gimnasio donde se llevarán a cabo las terapias y que estará al lado de las consultas de fisioterapia y salas para los tratamientos. También se dará cabida a los vestuarios para el personal del centro y al archivo del mismo. Otras instalaciones de uso habitual, según explican desde el centro, serán una recepción, un garaje con varias plazas, trasteros y una zona de usos múltiples (que quedará libre por si, en algún momento, hay que volver a ampliar las instalaciones). 

La parcela donde se ubicará está situada en la avenida Godofredo Ortega y Muñoz, frente a la jefatura de Policía Local y junto al edificio de Aexpainba. «Este terreno fue donado en su día por Diputación de Badajoz, cuando la construcción del edificio iba a correr a cargo de la obra social de Caja Badajoz», explica Robles. El ente se acabó desligando de la construcción, lo que hizo que Apnaba pidiera ayuda a la Junta de Extremadura. «Ha habido algunos retrasos pero es normal, la pandemia lo ralentizó todo. Ahora está aprobado y solo nos queda esperar», afirma el presidente de la asociación.