El joven herido por un disparo en Badajoz recibió además una paliza

Un joven de 30 años permanece ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Universitario de Badajoz como consecuencia del disparo que recibió en el abdomen la madrugada del viernes, hacia las 3.00 de la mañana. Este diario ha podido saber que antes del disparo, la víctima recibió una paliza por parte de su agresor o agresores. Según ha informado el Servicio Extremeño de Salud (SES), su estado es muy grave. El herido fue sometido a una primera intervención para intentar extraerle la bala y ha requerido una segunda. El joven es vecino de Cerro de Reyes.

La Policía Nacional, que se ha hecho cargo de la investigación, ha informado de que el tiroteo se produjo en la zona del arroyo de Calamón, en la barriada de Cerro de Reyes. La disputa, cuyo origen se desconoce, tuvo como resultado una única víctima, que recibió un disparo en el abdomen con un arma de fuego de pequeño calibre, que le provocó heridas de las que tuvo que ser intervenido ayer de forma inmediata.

La investigación para intentar esclarecer lo sucedido sigue abierta y, de momento, no hay detenidos. Tampoco se conocen las causas que han llevado a este desenlace y cuántas personas están implicadas en el enfrentamiento.

Se desconoce hasta el momento el lugar exacto donde pudo ocurrir la agresión. El viernes por la mañana, trabajadores del servicio municipal de Parques y Jardines que se encontraban recogiendo con el camión los montones de restos de poda y recortes, a la altura del puente situado junto al polideportivo de Antonio Domínguez, fueron interpelados por un agente de paisano que se identificó como Policía Nacional, quien les preguntó si habían encontrado algún resto de sangre en los alredores del parque. Los trabajadores no sabían el motivo de este interés. En todo caso, respondieron al policía que no habían hallado nada que pudiera estar relacionado con una agresión.

En este servicio municipal se vienen quejando desde hace mucho tiempo de los actos de vandalismo que sufren los parques de los arroyos los fines de semana, así como de la falta de iluminación en la zona baja, la más próxima a los cauces, que carece de alumbrado público. Una oscuridad de la que se valen quienes quieren acuden a estos lugares porque quieren ocultarse.

Hace ahora justo dos años, el 30 de enero de 2021, fue hallado el cadáver de un hombre de 42 años en el parque del Rivillas, en un recoveco junto a la muralla del foso del revellín de San Roque. El cuerpo presentaba heridas de arma blanca y todo apuntó a que se trató de un suicidio.

Pocos meses antes, en junio de 2020, un joven de 28 años resultó herido por la noche también en el parque del arroyo Rivillas, tras ser apuñalado con un arma blanca. La víctima sufrió una herida en el abdomen, de la que tuvo que ser intervenido en el Hospital Universitario. Su evolución fue favorable.