En el parque de la margen derecha del río Guadiana

Los deseos para el 2023 vuelan sobre el cielo de Badajoz

Los ciudadanos sueltan 3.000 farolillos con el anhelo de que todo salga bien el próximo año

Los deseos para el 2023 vuelan sobre el cielo de Badajoz

SANTI GARCÍA

«Que todo salga bien en 2023», ese es el deseo que más se escuchaba entre los ciudadanos que se han acercado esta tarde al parque de la margen derecha del río Guadiana para hacer volar los farolillos con la actividad que ha organizado la Asociación La Alcazaba por décimo año. Desde primera hora de la tarde decenas de personas han ido al puesto en el que se vendían para hacerse con el suyo y en menos de dos horas ya habían comprado unos 2.000 de los 3.000 que adquirió la asociación.

Adultos y niños mandan al aire sus deseos para el próximo año.

Adultos y niños mandan al aire sus deseos para el próximo año. / SANTIAGO GARCIA VILLEGAS

Muchos de los participantes no tenían decidido que pensamiento querían que volara hasta el próximo año. Se podía plasmar en el farolillo escrito con rotulador o tenerlo guardado en la cabeza. Desiré Delgado estaba dubitativa pero se ha decantado por pedir estabilidad económica. Ella había comprado tres, al igual que Begoña Gómez para sus tres hijos. La mayor quería que todo fuera bien, el chico que le trajeran muchos regalos los reyes magos y la pequeña no se elegía algo en concreto. «Felicidad y tranquilidad» apuntó, por su parte, Alfonso Cedero.

Para todos ellos era la primera vez que iban a participar en esta llamativa actividad que ha iluminado el cielo pacense, como si de estrellas se tratara, y que han ido desapareciendo lentamente en la lejanía.

Décima edición de la Noche de los Deseos, organizada por la Asociación La Alcazaba.

Décima edición de la Noche de los Deseos, organizada por la Asociación La Alcazaba. / SANTIAGO GARCIA VILLEGAS

Víctor Gallego, de la asociación, ha explicado que también les han dado pulseras de colores a las personas que han estado en esta décima edición y que mañana irían a recoger los farolillos en el sitio donde han caído.