Los plazos para construir la segunda rotonda de Cerro Gordo se están alargando más de lo que le gustaría a sus vecinos, que llevan ocho años esperando el nuevo acceso a la barriada por la carretera Nacional-V. Fue en 2014 cuando comenzaron a reclamar esta actuación, a la vista de los inconvenientes que supone la actual glorieta (con forma de T y con giros solo a la derecha), pues permite entrar desde Badajoz y salir de la barriada, pero no acceder a la misma cuando se circula desde Talavera la Real o la Urbanización Guadiana.

La rotonda la va a acometer el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que ha reservado una partida de 800.000 euros. En junio de 2021 se aprobó de manera provisional el proyecto de trazado y, tras someterse a exposición pública y abrirse el periodo de alegaciones, el pasado mes de febrero recibió el visto bueno definitivo. En estos momentos, según informaron ayer fuentes de la Delegación del Gobierno en Extremadura, el proyecto de ejecución está en fase de redacción y, una vez que se termine y sea supervisado, se procederá a licitar su construcción. Por ahora, no hay fecha concreta para el inicio de las obras. 

El presidente de la Asociación de Vecinos de Cerro Gordo, Antonio Osorio, valoró los avances en este compromiso, pero reconoció que los vecinos están «cansados» de que los plazos se eternicen. «Es el cuento de nunca acabar con las administraciones», lamentó. «Es un contratiempo para todo el mundo y tendría que estar resuelto hace mucho tiempo. Estamos deseando que por fin empiecen a construir la rotonda, pero no sé si lo veremos este año», temió el representante vecinal, quien recordó que en la barriada hay censados unas 5.900 habitantes, pero estima que realmente superan los 7.000. 

La densidad poblacional y el flujo de vehículos requiere esa segunda rotonda de acceso, sobre todo teniendo en cuenta que está próxima al centro de salud, al que también acuden los vecinos de la Urbanización Golf Guadiana, que tienen que dar un rodeo de varios kilómetros para llegar hasta él. 

El propio ministerio reconoció que la intersección en T, en el punto kilométrico 393’5, no resuelve de forma adecuada la movilidad que se genera en este entorno. El proyecto prevé una rotonda circular con una calzada anular de 28 metros de radio exterior y dos carriles de 4 metros de anchura cada uno. 

Plano con la rotonda prevista en la barriada por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Vivienda.

Además, también con el objetivo de mejorar la seguridad vial, se ha diseñado una conexión para la reposición de un acceso existente en las inmediaciones de la glorieta, garantizando la entrada a varias parcelas. El proyecto se completa con la restitución de servicios, señalización y balizamiento y la instalación de sistemas de contención de vehículos y drenajes.