La más popular y ya tradicional de las carreras de la barriada pacense de San Roque, la San Romilla, que organiza la Escuela Deportiva Guadalupe, afincada en el colegio del mismo nombre, ha trasladado por primera vez su recorrido en Badajoz y se está celebrando esta mañana de domingo en el parque de margen izquierda del Guadiana, a la altura de Puerta Palmas. Un encuentro familiar en torno a centenares de corredores de todas las edades, que está colmando de buen ambiente la explanada de los bares del río en la sexta edición de este encuentro deportivo, educativo y solidario, que ha vuelto con fuerza y entusiasmo tras un paréntesis de dos años debido a la crisis sanitaria. Las ediciones de la 'etapa covid' fueron virtuales.
Se han programado siete carreras. La más tempranera ha sido la de la categoría baby, que se ha celebrado a las once de la mañana, con niños de entre 3 y 6 años. Niños y padres, pues muchos de los pequeños corredores iban de la mano de sus familiares sin perder la sonrisa y con algún tropezón que otro. Tras ellos han corrido las categorías benjamín, alevines, infantiles, cadetes y junior y senior, masculinos y femeninos. La carrera estaba abierta a cualquier corredor de la ciudad, no solo del colegio. Se han apuntado 700 niños y adultos.
Para Antonio Barril, coordinador de la Escuela Deportiva Guadalupe, lo que más caracteriza a esta carrera, entre las muchas que se celebran en Badajoz, es que es una cita "muy familiar", como se puede comprobar en el paseo Fluvial, donde padres, abuelos y hermanos acompañan y animan a los corredores, a la salida, a la llegada y durante el recorrido, que es de una milla urbana, 1.609 metros.
Su organización tiene fin solidario, pues todo lo recaudado por la venta de dorsales, camisetas y fila cero está destinado a la oenegé Entreculturas (en esta edición). A lo largo de la jornada, las pruebas deportivas se complementan con otras actividades, como talleres, magia, la presencia de la Legión 501 y música para que bailen los adolescentes.
Las anteriores ediciones se celebraron siempre en el entorno del Colegio Virgen de Guadalupe, pero el recorrido se ha tenido que cambiar por la decisión del ayuntamiento de establecer rutas urbanas fijas para las distintas carreras que se organizan para no interferir en el tráfico del entramado urbano. Barril comenta que "da pena" separar esta actividad del colegio y de San Roque, aunque también reconoce que con la experiencia de hoy, "parece que la acogida es muy buena y hay muy buen ambiente".
Esta edición ha sido la segunda más numerosa de cuantas se han celebrado de la San Romilla, pues en la segunda se llegó a un millar de deportistas. En número de participantes es una de las carreras populares de Badajoz más numerosas.
