La Fiscalía y la acusación particular piden tres años y seis meses de prisión tanto para el administrador de la empresa subcontratista que demolió un edificio de la calle Rivillas, en Badajoz, como para quien ejercía de encargado general de los trabajos, por un delito contra la seguridad y salud de los trabajadores y otro de homicidio por imprudencia al considerarlos «responsables» del accidente por el que un obrero falleció en marzo de 2019

Según el escrito de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Efe, el trabajador se encontraba el 7 de marzo de 2019 sobre el forjado de la tercera planta del edificio, en fase de demolición, junto a un compañero para, entre los dos, demoler la estructura de esa planta y retirar los escombros.

«A pesar de no existir protecciones colectivas, tampoco se había instalado una línea de vida como tal, sino que sobre el suelo existía una cuerda de largas dimensiones que se empleaba para atarse los dos trabajadores su respectivo arnés de seguridad», tal y como se indica.

A juicio de la Fiscalía, «la cuerda se encontraba unida a un punto fijo no equidistante de todo el perímetro de la planta, y por su longitud implicaba que cualquier caída, con o sin arnés puesto, pudiera suponer graves consecuencias», como así ocurrió después de que el empleado cortase una viga y se precipitase desde una altura aproximada de nueve metros, lo que le ocasionó la muerte. El juicio se celebrará este miércoles en el Juzgado de lo Penal número 1 de Badajoz.