Badajoz está más cerca de tener bandera y podría lucir un león rampante carmesí sobre un fondo «claro». Esta es, según dijo el alcalde, Ignacio Gragera, la propuesta que más consenso ha cosechado entre los colectivos y expertos para la futura enseña de la ciudad, única capital de provincia que aún no cuenta con este símbolo. Es solo un avance en un asunto que está pendiente desde hace más de dos décadas y sobre el que de forma recurrente se ha venido hablando a lo largo de los años, sin que hasta la fecha se hayan dado pasos en firme. No había acuerdo sobre su diseño y ningún alcalde ha querido que la bandera local fuera motivo de discrepancias, sino todo lo contrario, debía contar con un amplio respaldo de la sociedad civil.

Gragera ya anunció, tras llegar a la alcaldía, su intención de retomar la elección de la bandera de Badajoz y la Concejalía de Cultura ha elaborado un dossier en el que se recopilan todas las propuestas que asociaciones, expertos y particulares han presentado a lo largo de los años. De las ideas que plantean, se concluye que la mayoría defiende la presencia del león rampante (como el del pendón donado por Alfonso IX tras la reconquista), así como que el fondo debería ser de color claro (como el de la bandera del Reino de León, que es blanco). No está tan claro qué otros elementos o símbolos se podrían incorporar a la enseña, que tendrán que acordar los colectivos y expertos que formarán los grupos de trabajo que se van a poner en marcha para consensuar el diseño definitivo de la bandera de la ciudad.

Aprovechando que este sábado se celebra el Día de Badajoz, en el acto institucional de las Casas Consistoriales, el alcalde tendrá la oportunidad de hablar con representantes de las asociaciones e historiadores que llevan años promoviendo y reclamando la creación de la bandera sobre la labor que se les va a encomendar, pues la decisión será de la sociedad civil y los grupos políticos se mantendrán al margen, respetando así el acuerdo al que al que se llegó en el pleno de marzo de 2021, en el que se aprobó que el día oficial de la ciudad sería el 19 de marzo y la creación de una comisión sobre la enseña local, que no ha llegado a celebrarse nunca.

El alcalde reiteró la disposición del ayuntamiento a colaborar para lograr ese amplio consenso que requiere una decisión «de esta relevancia», dijo. Aunque confió en que el acuerdo se alcance «en los próximos meses», dejó entrever que no tiene prisa, pues el «interés y trascendencia» del símbolo sobre el que se va a debatir merece «paciencia». 

Fue en abril de 1998 cuando la Asociación Amigos de Badajoz reclamó por primera vez públicamente que Badajoz debía tener su bandera, una petición a la que se sumó la Asociación Cívica. La concejala de Cultura, Paloma Morcillo, explicó ayer que desde entonces se han recibido otras muchas y todas han sido tenidas en cuenta. En 2013, el equipo de gobierno propuso que fuera blanquinegra, con la intención de presentarla ese mismo año durante los actos conmemorativos del Milenio del Reino de Badajoz, pero no pasó de un anuncio, porque no contó con suficiente respaldo.

Rigor histórico

Amigos de Badajoz mantiene su propuesta de que sea una bandera de color carmesí pero, según su presidente, Manuel Cienfuegos, no se van a «cerrar en banda» a otras opciones, porque lo que quieren es que el diseño que se elija sea fruto de la «unanimidad y el rigor histórico», defendió.

La concejala de Cultura se mostró convencida de que se alcanzará el consenso en el diseño de la enseña -«será una bandera hecha entre casi todos», dijo-, que tendrá que estar avalado por informes de expertos y la Sociedad Española de Vexilología. Será después cuando se lleve al pleno municipal, que debe respaldar su creación por mayoría absoluta.

En los planes del ayuntamiento también está recuperar el pendón de Badajoz, rectangular, de color rojizo o carmesí y con el escudo de la ciudad y las armas de Castilla y León, así como de oficializar el himno ‘Badajoz vencedora’, para que suene en los actos institucionales.