Todos los costaleros y capataces que desfilen en la Semana Santa de Badajoz se someterán a diario, cada vez que procesionen, a test de antígenos y a todos se les exigirá la pauta completa de vacunación, según ha confirmado el presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías, Cayetano Barriga, que defiende esta medida «por tranquilidad». Esta decisión supone que se tendrán que adquirir, calculan, unos 5.000 test, que aún no saben cómo se van a sufragar pero ya están negociando con varios laboratorios para conseguir un precio lo más bajo posible.

Solo para la Procesión Magna, que se celebra el Viernes Santo, se tendrán que realizar entre 800 y 900 pruebas, pues saldarán doce pasos, cada uno con su cuadrilla y su relevo correspondiente. A los nazarenos no se les exigirá. La agrupación está también buscando en qué lugares se pueden hacer estas pruebas, para lo que está en conversaciones con colegios profesionales. Esta solución se ha decidido barajando el mejor de los escenarios, pues Barriga confía en que la Semana Santa de Badajoz se pueda celebrar con la mayor normalidad posible, pero estarán atentos a la evolución sanitaria y a las medidas que marque Salud Pública.

Badajoz ya está inmersa en su Carnaval, cuya celebración se intensificará a partir del fin de semana. Las restricciones para evitar los contagios se han reducido y es inevitable pensar en qué pasará los días siguientes si la gente se lanza a las calles sin adoptar medidas de prevención. En la Asociación de Costaleros y Capataces San José no pueden evitar que exista cierta preocupación porque debajo de un paso un positivo es un contagio seguro, advierte su presidente, Ricardo Becerra. De ahí que estén decidiendo medidas de prevención. Por protocolo han establecido que después de los carnavales no habrá ensayos hasta comprobar si hay contagios, cuando lo habitual era empezarlos el jueves siguiente al Miércoles de Ceniza. La cuestión está en que buena parte de los costaleros participan también en el Carnaval. Además, la asociación solo tendrá un ensayo por hermandad, en lugar de 4 (16 en total), también como medida de prevención. Empezarán el domingo 6 de marzo y seguirán los domingos siguientes.

Para la realización de los test, los costaleros y capataces serán citados tres horas antes de la hora del desfile. Si se detecta algún positivo, se aísla al contagiado con el protocolo que marque Salud Pública. Becerra defiende que alguna institución debería sufragar este gasto extra. La asociación ofrece su sede para realizar las pruebas porque además entre sus asociados tienen varios enfermeros que están dispuestos a echar una mano.

Como todos los colectivos involucrados en el desarrollo de la Semana Santa de Badajoz, la Asociación de Costaleros y Capataces San José está «expectante», según su presidente, ante la evolución de la situación sanitaria que, no obstante, no les impide mostrarse «ilusionados, con muchas ganas, como es lógico, después de dos años sin Semana Santa con pasos en la calle”.

En verano Becerra se reunió con Cayetano Barriga, que le confirmó la pretensión de recuperar los desfiles profesionales. En noviembre la asociación de costaleros se puso las pilas y adelantó su ‘igualá general’, que organiza cada año con todos los costaleros, normalmente en enero. En la igualá, la asociación avisa a la sede a todos los costaleros asociados para medir su altura (séptima vértebra), porque algunos de un año a otro pueden cambiar de estatura y siempre entran una veintena de personas nuevas. Los miden, les preguntan sus preferencias por paso y los colocan en las trabajaderas de cada hermandad. En noviembre, la asociación solo contaba con el 80% de costaleros. En un año normal, la ‘igualá’ se organiza en enero y ya tienen todos los costaleros además de una veintena de repuesto. Pero para este año vieron que faltaba gente y algunos de los que estaban no daban certeza de poder salir. San José saca cuatro hermandades (ocho pasos) y además participará con tres más en la Procesión Magna, que lleva casi 500 costaleros, de los que esta asociación aporta la mitad: 250. A día de hoy, están contentos porque se muestran casi seguros de que completarán los pasos, «aunque hay mucho miedo todavía». El problema se presentará si un porcentaje importante de los costaleros diese positivo el día que sale su paso. De ahí que la asociación haga un llamamiento para contar con «cuerpos especiales» como contingencia para el relevo. De momento da resultado y están acudiendo antiguos. «La ciudad debe despertar y ver que este año es un año difícil y distinto y hace falta que la gente eche una mano», anima su presidente. H