La Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) ha iniciado los trámites para licitar la redacción del proyecto de mejora de la continuidad fluvial en el azud de la Granadilla, por importe de 107.377 euros, en el objetivo de lograr la permeabilización del azud con compuertas, como medida para luchar contra la presencia del nenúfar mejicano. En el proyecto, cuya redacción ahora se licita, se estudiarán las posibles alternativas técnicas y deberá contemplarse la inclusión de diversas actuaciones, según ha informado hoy. Entre estas acciones se encuentran la construcción y retirada de ataguías que permitan la realización de los trabajos en condiciones de seguridad, o el diseño e instalación de un sistema de descarga sobre el azud que facilite la movilidad de los sedimentos acumulados.

También se incluye la instalación de un sistema que permita el traslado ininterrumpido de las aguas residuales desde la margen izquierda del río Guadiana hasta la margen derecha, donde se encuentra la estación depuradora de aguas residuales (Edar).

El inicio de los trámites para la redacción del proyecto se ha publicado en la Plataforma de Contratación del Estado.

El Plan de Gestión de Riesgo de Inundación de la Demarcación Hidrográfica del Guadiana (PGRI) contempla un Programa de continuidad de sedimentos, y en este sentido, entre las actuaciones ya identificadas en la parte española de la demarcación hidrográfica se encuentra la mejora de la continuidad fluvial de los azudes pacenses de la Granadilla y la Pesquera.

Esta actuación ya se anunció en 2019, cuando este diario informó de que la CHG había elaborado un estudio en el que se contemplaba la posibilidad de hacer un dragado del fondo y de realizar aberturas en los muros de los azudes que delimitan el tramo urbano el río a su paso por Badajoz. Esto es entre el azud de Gévora, aguas arriba, y el de la Granadilla, más próximo a la frontera con Portugal, aguas abajo. Se trata de un estudio específico sobre esta especie invasora, que se abordó tras el plan de choque desarrollado con la Unidad Militar de Emergencias (UME), entre noviembre y marzo pasados, para limpiar el cauce de camalote. Dicho estudio contemplaba varias alternativas para llevar a cabo el dragado del fondo del cauce para eliminar el nenúfar; una de ellas sería hacer unas compuertas en el azud de Gévora y en el de la Granadilla, que se puedan abrir para verter agua y vaciar el cauce del tramo urbano. La instalación de unas compuertas en ambos azudes se planteó como medida dado que uno de los problemas que plantea la lucha contra el nenúfar mexicano es que al no haber desagüe de fondo en estos muros, se producen depósitos de limos y se colmata el tramo urbano del río a su paso por Badajoz.