La Diputación de Badajoz y Cruz Roja Badajoz, representados por sus respectivos presidentes, Miguel Ángel Gallardo y Alfonso Méndez, firmaron ayer un convenio por el cual la institución provincial destinará 60.000 euros a mejorar la atención de los hijos de mujeres maltratadas.
Las acciones, que se llevarán a cabo en toda la provincia, vienen a complementar la intervención psicosocial que ya se realiza con las víctimas de violencia de género y sus hijos, y se dividen en cinco categorías: sociocultural, deportiva, salud y medio ambiente, acompañamiento educativo y ámbito familiar y comunitario.
Alguna de las actividades en las que se concretarían son asistencia al cine, jornadas en la playa, visita a centros de reciclaje o talleres de autoexpresión, entre muchas otras. Los destinatarios son niños y jóvenes de entre 6 y 21 años que hayan sufrido la violencia de sus padres o parejas de sus madres con el objetivo de hacerles daño a ellas.
El proyecto se desarrollará durante un año, aunque Gallardo aclaró ayer que podría dejar de ser piloto para consolidarse como una actuación más en este sentido: «Desde las instituciones públicas debemos siempre buscar a los mejores aliados para lograr llegar a todos y cada uno de los objetivos que nos marcamos en distintos programas, y Cruz Roja es de las organizaciones con mayor relevancia, prestigio y trayectoria», características que le permitirán a la diputación seguir trabajando en la protección de las mujeres y, en este caso concreto, en la prevención de la violencia vicaria.
