Badajoz ocupa los primeros puestos de las ciudades con mejor agua del grifo de España, pero eso no significa que su calidad no pueda aumentar. Con este último propósito, el ayuntamiento va a destinar 398.500 euros a la instalación de una nueva toma flotante en el pantano Peña del Águila, en Villar del Rey, que abastece a la capital pacense y a sus poblados.
En estos momentos, en la presa hay instaladas dos tomas flotantes fijas: una en superficie, a unos 5 o 6 metros del nivel máximo del embalse, y otra situada casi en el fondo. La que colocará en los próximos meses será móvil, se conectará a través de un tubo esta última y permitirá captar agua a 1,5 metros de la superficie, por lo que será de mayor calidad.
El concejal de Aguas, Antonio Cavacasillas, explicó que con esta nueva toma flotante se evitará que las captaciones arrastren químicos (como el amonio o el manganeso) o sedimentos, por lo que el agua llegará con mayor pureza a la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de Santa Engracia y, por lo tanto, se podrán disminuir los reactivos que se utilizan para su potabilización.
La toma móvil que se va a instalar permitirá que la extracción del agua se realice siempre a la misma distancia de la superficie, independientemente de la capacidad a la que se encuentre el pantano. Ahora, cuando el nivel de agua baja, la toma flotante fija que está colocada a seis metros de la superficie queda más cerca del fondo, con lo que el porcentaje de impurezas que arrastra se eleva y eso obliga a que la cantidad de sustancias en le proceso para potabilizarla sea mayor.
«Con la nueva ya no va a ocurrir esto, porque estará móvil y, en cuanto haya menos agua, se irá desplazando de manera automática y seguirá extrayendo agua a un metro y medio de la superficie, que, según los técnicos, es suficiente para tener un agua de calidad todo el año», expuso Cavacasillas.
El suministro e instalación de la toma flotante se sacará a licitación, por procedimiento abierto simplificado, de manera inminente. Una vez adjudicada la actuación, el plazo de ejecución será de tres meses.
El concejal defendió que con este proyecto se invertirán casi 400.000 euros para que Badajoz no solo se mantenga a la cabeza de las ciudades con las mejores aguas del grifo, sino también para prevenir que en periodos de sequía «importante» el agua que llegue a los vecinos sea de mala calidad. «Se trata de adelantarnos a una posible situación de bajada drástica del agua embalsada en Villar del Rey y ser más eficientes cada día para ofrecer a la ciudad un agua mejor», dijo.
De esta actuación también se beneficiarán otras localidades que se abastecen del pantano de Peña del Águila, al que están conectadas desde la red de Badajoz.
Las estaciones de bombeo de San Roque, en el 2022
Por otra parte, el concejal de Aguas avanzó que la remodelación de las estaciones de aguas residuales norte y su de San Roque se va a incorporar a los presupuestos del 2022 para sacar a concurso la obra el próximo año. Cavacasillas explicó que los técnicos han optado por un proyecto intermedio entre la renovación y el arreglo, que rebaja considerablemente el coste de esta actuación, pero, sobre todo, garantiza la «eficacia de las instalaciones». La sociedad pública Acuaes presupuestó la sustitución de las estaciones de bombeo en 3 millones de euros, pero con el nuevo proyecto la inversión necesaria sería de entre 1,8 y 2 millones de euros (que previsiblemente se reducirá en la adjudicación).
Cavacasillas aseguró que la intención del ayuntamiento es que esta actuación no se demore más, pues es una «prioridad» acabar con los vertidos en el arroyo Rivillas, que generan los malos olores que desde hace años sufren los vecinos de San Roque, Pardaleras y Suerte de Saavedra, pero también todos aquellos que pasean o hacen deporte por el paseo del arroyo.
No obstante, el mal olor no solo lo generan estos vertidos, pues Aqualia ha detectado filtraciones que podrían ser también responsables del hedor que impregna este entorno. Una vez que se confirme, se estudiarán soluciones.
