El sector hotelero pacense logra salvar el verano. El aumento de la incidencia de la covid-19 no ha frenado la llegada de turistas, lo que ha supuesto que en algunos establecimientos la ocupación hotelera haya alcanzado hasta el 80%. Esta cifras se distancia de la del  año anterior, mucho menos positiva y, en algunos hoteles, incluso supera a los datos del verano del 2019, cuando aún no había pandemia.

Es el caso del NH Gran Hotel Casino, cuyo personal se reincorporó al completo nada más levantarse el estado de alarma, y ha registrado una ocupación de entre un 70% y 80% durante estos meses. «Se notó el cierre con Portugal. Nos hemos encontrado sobre todo con mucha gente de paso», apuntaron fuentes del establecimiento. Viajeros del norte que se desplazan al sur o de Madrid y Valencia que hacen parada antes de llegar a su destino final, Portugal. 

También ha sido muy positivos los datos de ocupación para el hotel Condedu, que está superando el 90% de ocupación este mes. 

El balance en el sector hotelero es casi unánime: «agosto está siendo un mes muy bueno». Lo confirman desde el Ilunion Golf, donde de sus 120 habitaciones «no hay día que tengamos menos de 90 ocupadas». A diferencia del resto, en su caso el 70% de sus clientes este mes han sido portugueses. 

La mayoría de hoteles se muestran optimistas con respecto a las previsiones más allá del verano, aunque coinciden en la trascendencia de la celebración de eventos como Carnaval o Semana Santa, que continúan en el aire, para el sector. «Tenemos las esperanzas puestas en la vacunación», declaró, José Luis Iniesta, responsable de cátering y tesorero de la Confederación Empresarial de Turismo de Extremadura (Cetex) y director del hotel Mercure Río. «El Mundialito de fútbol base, el ‘Alcazaba Festival’ o la vuelta ciclista sí han hecho que lleguemos al 100% de ocupación», dijo. 

Los datos son mejores a los presentados en 2020 para el Hotel Río, pese a que la valoración general del verano se queda en «aceptable» con una ocupación alrededor del 60%. «Estamos salvando la temporada gracias a los ertes», aseguró. La ausencia de celebraciones como comuniones y bodas ha hecho que, del personal dedicado específicamente a este área en la plantilla, sólo un 15% haya podido reincorporarse. A pesar de la vacunación, Iniesta reconoció que haber vuelto a las restricciones de nivel dos ha afectado al tercer pilar del hotel: el que componen cafetería y restaurante. «Si van a venir a cenar ocho amigos y les dices que tienen que separarse, al final prefieren quedarse en sus casas», lamentó. 

Desde el sector destacan la importancia del las pernoctaciones por motivos de negocio. Las estancias cortas son una de las principales razones que ha llevado a los hoteles a ofrecerse como puntos de información turísticos, informa Efe. «Hay muchas personas que terminan sus compromisos temprano y tienen el resto del día vacío», señaló Iniesta, quien también pone en valor los beneficios a para el sector de «todas las obras civiles que se están llevando a cabo en la ciudad, citando como ejemplo los proyectos previstos en la plataforma logística.