El colectivo cultural La Hoguera ha puesto en marcha una campaña, bautizada como ‘La calle no se calla’, para mostrar su rechazo a que se sancione a los músicos que actúen la vía pública sin autorización, para lo que la nueva Ordenanza Municipal de Seguridad y Convivencia Ciudadana del Ayuntamiento de Badajoz, que ahora se está tramitando y se llevará al pleno de septiembre para su aprobación definitiva, recoge multas de entre 30 y 750 euros.

Anzo Ruiz, responsable de comunicación de La Hoguera, criticó que se quieran «incrementar» la cuantía de las sanciones y restringir los espacios en los que se puede actuar (no podrán estar cerca de terrazas ni bares) y, sin embargo, no se concrete cómo se pueden obtener las autorizaciones ni tampoco cómo se regulará esta actividad, pues lo único a lo que hace referencia el texto es a que «se podrá cantar en la calle cuando no se superen los límites del respeto mutuo», algo muy subjetivo para valorar en caso de conflicto. 

Según explicó, hasta ahora la ley permite a los músicos tocar en la calle sin permiso, aunque la policía les ha solicitado en muchas ocasiones la autorización municipal. «Cuando la han ido a solicitar al ayuntamiento, siempre se ha denegado porque no quieren o porque no se sabe quién la tiene que dar», aseguró Ruiz. «No tenemos problemas con que haya que pedir un permiso, pero que nos digan dónde y qué requisitos, porque hasta ahora todo eso ha estado en el aire», lamentó.

Esta campaña se ha puesto en marcha coincidiendo con el cierre del periodo de alegaciones a la nueva ordenanza, a la que La Hoguera ha presentado la suya al considerar que la normativa que afecta a los músicos es «injusta» y pone «trabas» a una actividad que «lejos de ser un problema para la ciudad, dota de valor al centro histórico de Badajoz». Vídeos con actuaciones, entrevistas a músicos a través de las redes sociales y pegada de carteles son algunas de las acciones que está llevando el colectivo para que «no se penalice» a estos artistas. Además, están preparando un acto público, aunque aún no tiene fecha. 

El colectivo defiende que con su reivindicación busca poner en valor esta actividad artística y la figura de los músicos, muy castigados por la pandemia y para los que, en muchos casos, su economía depende de los ingresos extra de sus actuaciones en la calle.