En una época donde las compras tienden a realizarse cada vez más de forma online, la Fundación Atabal decidió organizar ayer por la mañana en la plaza de Cervantes de San Andrés un mercadillo de trueque a través de su proyecto Ser+Sostenible.

«Queremos hacer comunidad, generar más convivencia dentro del barrio», cuenta la coordinadora, Cristina Leal. Se trata de una actividad más entre las muchas que han realizado ya con el mismo objetivo: charlas sobre huertos urbanos, paseos en bici...

Además de llevar a cabo intercambios, los pacenses que se acercaron hasta allí pudieron disfrutar del micro abierto que se habilitó y, en el caso de los más pequeños, de un espacio pensado especialmente para ellos.

El motivo por el que la fundación decidió organizar un mercadillo de trueque y no de compraventa tiene su origen en la búsqueda de otras formas de relacionarse: «La idea es crear otras maneras de socializar y no tenerlo todo mercantilizado, sino que se fomenten más las relaciones de tú a tú sin ningún intermediario, a través de un contacto directo», explica Leal.

Los interesados en participar fueron hasta allí con los objetos de los que se querían desprender. A cambio, recibían una etiqueta verde, amarilla o azul equivalente al valor que ellos mismos les habían asignado. Con ella acudían al expositor correspondiente a su color para recoger su nueva adquisición, todo sin tener que sacar el monedero del bolsillo.