Ya hay fecha para que el Ayuntamiento de Badajoz se reúna con los feriantes para negociar las condiciones en las que celebrar la Feria de San Juan. Los empresarios han sido citados el lunes (a las 10.00 horas) por la concejala de Ferias y Fiestas, Lara Montero de Espinosa, que de momento no adelanta condiciones ni pone líneas rojas. Según manifestó ayer a este diario, la intención del ayuntamiento es «colaborar y facilitar todo lo posible, porque entendemos su situación y porque la ciudad tiene que empezar a moverse, siempre y cuando se garantice la seguridad ante todo y se cumpla la normativa autonómica vigente». A partir de ahí, con estos criterios generales, se pondrán a trabajar y la concejala confía en alcanza un acuerdo «porque siempre ha habido buena sintonía y la seguirá habiendo».

Los empresarios, por su parte, sí tienen claras sus condiciones, que son las mismas que están poniendo sobre la mesa en otros ayuntamientos. Parten de la base de que en los grandes municipios se multiplican las dificultades. La prueba está en Cáceres, donde no lograron convencer al ayuntamiento para que permita, además de atracciones en el ferial, los puestos de comida, porque conllevan movilidad sin mascarilla. Ayer por fin alcanzaron un consenso para que se pueda celebrar con estos requisitos, aunque habrá que aplazar la feria de San Fernando, que se tendría que celebrar a finales de mayo y se pospone a septiembre, cuando la situación sanitaria se prevé más tranquila por efecto de la vacunación.

La representante de los feriantes, Rosa Morgado, lo tiene claro: «si a Cáceres hemos dicho que no, a Badajoz no le podemos decir que sí». Eso quiere decir que sus condiciones van a ser idénticas: en el recinto ferial de Caya se instalarán todos, atracciones y puestos de comida y bebida, cumpliendo el protocolo establecido con todas las medidas sanitarias. «Si Badajoz no cede a que se instalen los puestos de comida está claro, nosotros no nos podemos dividir, no podemos discriminar a parte de nuestro sector, estamos todos en las mismas circunstancias».

Hasta ahora, lo único que ha avanzado el ayuntamiento pacense es que no abrirán las casetas del ferial, pero sí habría atracciones en el recinto. En ediciones anteriores a la pandemia, en el ferial de Badajoz se instalaban casi 90 atracciones, más lo puestos de comida, casetas de tiro y tómbolas. Rosa Morgado apunta que el de Badajoz es uno de los mayores recinto de la región. En las reuniones previas con los feriantes no han hablado de estas condiciones. Morgado explica que habría más distancia entre las atracciones y ya augura que posiblemente no puedan estar todos los feriantes, porque habrá empresarios de fuera a los que no les compense.

Los feriantes también están pidiendo a los ayuntamientos que no les cobren tasas, pero este requisito es negociable. Sí lo ha aceptado, por ejemplo, el de Villanueva del Fresno, cuya negociación se cerró ayer. A cambio, colaborarán con campañas solidarias y también habrá Día del Niño. Sí pagarán la electricidad.

En Badajoz, Rosa Morgado entiende que la exención o reducción de las tasas es más complicada, aunque «lo vamos a intentar». En cuanto al anuncio de instalar atracciones en los barrios, de momento no está sobre la mesa. «Primero está la Feria de San Juan», recalca y una vez que se negocie su celebración, las atracciones tienen ya permiso para instalarse en plazas y parques de la ciudad, si no están en otras ferias. «Espero que Badajoz entienda que la Feria de San Juan se tiene que celebrar, no solo por los feriantes, sino por los niños».