Las obras se reanudaron tras el parón obligado por el estado de alarma, pero si continúan al ritmo actual, terminarán en un mes y los cines y los nuevos locales con los que va a contar el centro comercial El Faro de Badajoz, podrían inaugurarse en otoño. Según el gerente, Alberto Acero, aún están pendientes de cerrar una fecha de apertura, que se ha pospuesto por la paralización temporal de las obras y que debe ajustarse a los requisitos de la desescalada. Pero la previsión es que después del verano esté abierta toda la ampliación, que incluye 7 salas de cine y 14 nuevos locales.

El espacio que Cine Yelmo ocupará en alquiler con sus salas se entregó antes del estado de alarma y lleva trabajando ya un tiempo en su adecuación. Esta misma semana se ha firmado el acuerdo con dos operadores que van a entrar en la ampliación, precisamente en dos de los locales de mayor superficie, y la próxima semana se rubricarán otros dos contratos, también para establecimientos bastante amplios. Para otros cuatro locales ya está también muy avanzada la negociación.

Antes del estado de alarma, había acuerdos que estaban prácticamente pendientes de la firma, dado que el proyecto lleva ya un tiempo de rodaje, desde el verano pasado. A pesar de la incertidumbre generada por la crisis sanitaria, Alberto Acero destaca que persiste el interés. El gerente no puede adelantar qué «rótulos» se van a incorporar a la ampliación de El Faro, por la confidencialidad de los contratos. Ya han solicitado poder revelarlos, pero aún no tienen autorización. Acero calcula que llegarán a los objetivos, pues están a un nivel de comercialización muy avanzado. La intención es poder cerrar los acuerdos para 10 locales de restauración, pues con el resto se están planteando proveer otros servicios específicos con otros operadores de los que existen menos en el mercado, pero que completarían la oferta del centro comercial, como pudiera ser una ludoteca y otras actividades de ocio, así como algún gimnasio. «Hasta que no tengamos esto bien claro, no se quiere avanzar, para que la mezcla comercial sea la adecuada», aduce. Están trabajando asimismo con operadores portugueses, por la relevancia del cliente luso en el centro comercial, así como pretenden integrar marcas extremeñas.

Como promotora, Castellanana Properties (propietaria del centro comercial) se está encargando de la obra civil y los espacios comunes, que terminará a lo largo del mes que viene y se está realizando en paralelo a la de los cines. La próxima semana se entregarán los primeros locales, que también podrán empezar las obras de adecuación de los interiores. «Trabajarán al mismo tiempo que nosotros y que el cine para intentar llegar todos a la misma fecha de apertura», señala el gerente.

La superficie que abarca la ampliación de El Faro es la que ocupaba la tienda de Bricor (de El Corte Inglés), que se trasladó a la segunda planta de Hipercor, en el propio centro comercial. En total son unos 8.000 metros cuadrados construidos. La entrada y salida será única, por la plaza exterior, al lado de Mediamarkt.

Luz natural

La distribución del interior se ha organizado en torno a un pasillo para el acceso hasta los cines, con los locales de restauración a ambos lados. En los espacios comunes habrá jardinería, se abrirá parcialmente el techo y se ha despejado ya la fachada para que entre la luz natural. Contará con aseos propios y con todos los servicios necesarios porque «en sí mismo es como un pequeño centro comercial».

Los nuevos cines y restaurantes complementarán la oferta actual del centro comercial y su horario será el correspondiente a los espacios de ocio y restauración. El horario actual de las tiendas de El Faro es de 10.00 a 22.00 horas, tantos las del interior, como las que tienen acceso independientes desde el exterior, como es Mediamarkt. Mientras que a la restauración se le permite funcionar desde las 9.00 de la mañana hasta las 00.30 horas o la 1.30 los fines de semana. El sistema del espacio ampliado será parecido y al estar ubicado en lo que era una nave, permitirá gestionarlo de una manera independiente, aunque en coherencia con el resto del centro. El gerente defiende que el proyecto de ampliación de El Faro es un salto cualitativo del centro comercial, pues da respuesta a una demanda de los clientes, que habían expresado su interés en contar con salas de cine y, por otro lado, la oferta de restauración se queda ahora corta los fines de semana.