La Guardia Civil y la Policía Local de Badajoz han intervenido 500 cigarrillos de fabricación casera en un establecimiento de chucherías situado frente a un instituto de San Roque. Fueron los padres de varios alumnos del centro los que alertaron de que en esta tienda se estaba vendiendo tabaco a los menores, por lo que el pasado 21 de febrero los agentes llevaron a cabo una inspección en este negocio, comprobando que en el mostrador se encontraban expuestos para la venta al público los 500 cigarrillos intervenidos, algunos de ellos repartidos en pequeñas bolsas.

El tabaco carecía de precintas fiscales y de control sanitario, con el consiguiente «peligro» para la salud, además de ser mercancía de contrabando, una situación que se agrava por su venta a menores.

El dueño de la tienda fue denunciado y se enfrenta a una sanción mínima de 2.000 euros y al cierre del establecimiento durante una semana,