Mayo de 1823. Los Cien Mil Hijos de San Luis, comandados por el duque de Angulema, han cruzado el Bidasoa y avanzan sin oposición hacia Madrid con el objetivo de exterminar el régimen constitucional establecido en el Trienio Liberal. Las Cortes han huído a Sevilla llevando consigo a Fernando VII y masones y comuneros buscan al hombre providencial que lidere la resistencia. Finalmente, logran que el rey encargue formar gobierno al emeritense José María Calatrava, un patriota ejemplar que unas veces vota con los diputados de la derecha y otras, con los de la izquierda.

José María Calatrava Peinado (1781-1846) es quizá el único presidente del Gobierno español nacido en Extremadura. Ahora gran desconocido, fue un hombre íntegro y conciliador, una brillante figura política de la época que debido quizás a la ausencia de una autobiografía, el desgaste político o incluso la defensa de unos postulados excesivamente progresistas para la Restauración que se instaló después, cayó en el olvido. Ahora, el periodista y exdirector del diario 'El Mundo', Pedro J. Ramírez "descubre" a todos los extremeños sus aportaciones y hazañas en el libro La Desventura de la Libertad. José María de Calatrava y la caída del régimen constitucional español en 1823 , una obra que incluye documentos inéditos del archivo del propio Calatrava.

El libro, publicado el pasado 8 de abril, fue presentado ayer en la Sala de Autonomía del Parlamento regional en un acto que además del autor, contó con la presencia del presidente de la Asamblea, Fernando Manzano; el líder del Ejecutivo regional, José Antonio Monago, el alcalde de Mérida, Pedro Acedo; el cronista de la capital autonómica, José María Alvarez; el líder del PSOE, Guillermo Fernández Vara o el vicesecretario de Organización del PP, Carlos Floriano, junto a numerosos miembros del Gobierno regional y diputados autonómicos.

El propio Pedro J. explicó en la presentación que la idea de escribir el libro surgió por casualidad, después de que un librero sevillano le ofreciera a través de internet algunos documentos procedentes del denominado 'Archivo del exministro José María Calatrava durante el Trienio Liberal'. En el mismo se incluían piezas "tan reveladoras" como unas Memorias elaboradas junto a sus ministros, el original del Manifiesto del 30 de septiembre de 1823 (la prueba definitiva de la felonía de Fernando VII, con su firma autógrafa) o unas Notas Reservadas que el propio Calatrava escribió para que no se le olvidaran: pedía que nunca vieran la luz pública y que se actuara de forma que "a nadie perjudique el contenido" en caso contrario.

"Al leer esto me dí cuenta de que la mejor manera de cumplir, casi dos siglos después, con el espíritu de ese deseo de un hombre tan notable como desconocido para los españoles de hoy, era tratar de reconstruir de la manera más fiel posible los acontecimientos de los tremendos cinco meses de la primavera y el verano de 1823", explica el autor, que recuerda que Calatrava tuvo que gobernar, durante el breve periodo de tiempo que estuvo en el cargo, con la traición de los generales --entre los documentos adquiridos por Pedro J. se encuentra la carta de suicidio del general Sánchez Salvador, que siendo ministro de Guerra se cortó el cuello en pleno conflicto bélico--, el tesoro público vacío y el propio rey Fernando VII conspirando desde dentro.