Este negocio, que ha logrado el premio al mejor servicio en la última edición del concurso Saborea Badajoz, lleva más de la mitad de su existencia evolucionando en la comida más importante del día. Siguen en evolución continua e introduciendo cambios de forma periódica.

Tomate york-queso curado

Café Bar Las Palmeras. Andres R FOTOGRAFIA

Se le echa pimentón, sal gorda y aceite y se pone a hornear. Otra opción es la de tomate asado. La última de sus propuestas tiene pechuga de pollo con sofrito de ajo y cebolla. Se bate con yogurt, patata y zanahoria. La crema se bate con queso mozzarela, se hornea y se añade cebolla caramelizada y orégano.

¿En qué momento deciden optar por tostadas más elaboradas?

Los tres años que llevamos de concurso han influido, aunque desde hace seis o siete años decidimos ir incorporando tostadas cada vez más elaboradas en nuestra carta. También ha influido mucho las demandas de la gente.

¿Cuándo empiezan a notar el ‘boom’ del concurso?

Hemos notado mucho lo del concurso. Somos un local que está más alejado y nos hace más falta que otro que esté en el centro y le llegue a diario más gente. Hay gente que ha venido solo para pedir la propuesta de este año. 

¿De qué manera investigan para nuevas propuestas?

Para la última tostada que hemos hecho fue mi hermano el que trajo la idea. Luego estuvimos probando combinaciones y, al final, nos decidimos por la que más impacto tuvo.

¿Cree que son viables estos precios para los desayunos?

Nosotros tenemos desayunos a 1,60€. Mucha gente pregunta a menudo si hemos subido los precios porque sabe que está subiendo el precio de casi todos los ingredientes, especialmente el pan. Pero sabemos que es un arma de doble filo. Si subimos mucho los precios, la tendencia es que la gente deje de entrar. Vamos a tener que soportar una subida para que por lo menos mantengamos la caja.

¿Se nota en la lista de la compra los ingredientes para hacer tostadas más elaboradas?

Se nota bastante. Si nos preguntas a todos los hosteleros, estamos intentando mantener los precios. Si la gente desayuna mucho fuera en Badajoz es por el buen precio.

¿Cómo tuestan el pan?

Tenemos un tostador eléctrico de dos fases con el que ponemos el pan a punto. Vigilamos que no quede ni muy quemado, ni muy poco hecho. También hay que tener en cuenta el tipo de cliente. No a todo el mundo le gusta igual de tostada.

¿Se puede seguir haciendo innovaciones con las tostadas?

Con las tostadas está pasando igual que los gin tonic. He visto a amigos míos que tienen establecimientos y le han echado cosas muy raras a las tostadas. Que las hacen para comer a mediodía. Me parece bien innovar, pero hasta cierto punto. Vamos a llegar al punto de fusionar comidas. Nuestra tostada te la puedes tomar perfectamente con una cerveza.

¿Qué es lo que más destacaría de su establecimiento?

La cercanía, sin duda. Somos un bar familiar. El ambiente es muy bueno y, de esta forma, se genera mucha confianza. Nos acabamos contando la vida entre todos. Hay gente que te deja las llaves de su casa para que las guardes. Somos un bar típico de barrio de toda la vida. Pero nuestra cocina sorprende. Hay que estar adaptado a los cambios que se van produciendo en el entorno.

Un bar con relevo generacional creado por un emigrante que vino desde Alemania 

Este bar existe desde1980. Lo abrió el padre de los actuales dueños, que era un emigrante que llegó desde Alemania. Tras un breve periplo con otro trabajo, decidió iniciar esta aventura hostelera. El establecimiento lleva funcionando 42 años con la misma familia. Hace casi 15 que se produjo este relevo generacional que permanece hasta el día de hoy. Recibe este nombre al estar ubicado en la calle con la que compartía denominación. Actualmente se llama Sebastián Montero de Espinosa. Después de heredar el negocio, creen que sus hijos podrán continuar con el legado de este negocio familiar.