Fallece María Montero de Espinosa, bailarina, coreógrafa y profesora de ballet clásico de Badajoz, a causa de una larga enfermedad.
Esta amante de la danza cursó sus estudios de ballet clásico fuera de la ciudad en una época en la que la oferta formativa profesional de esta disciplina no existía en Badajoz. Tras terminar sus estudios, volvió a casa para abrir su academia. Corría el año 1986.
Poco a poco, la academia se fue abriendo a otras disciplinas como el pilates, la danza contemporánea o la moderna, pero siempre con el ballet como pilar principal. La escuela de danza fue una de las primeras en representar anualmente sus actuaciones en el teatro López de Ayala.
Tras 30 años como academia, Montero de Espinosa consiguió en el año 2012 ofrecer la posibilidad de estudiar en Badajoz la carrera profesional de ballet clásico: logró la autorización de la consejería de Educación para impartir el grado profesional de esta danza, un hecho que le costó nueve años de trabajo. Ningún otro centro en la ciudad lo había conseguido.
Miles han sido los pacenses que han pasado por sus manos. Algunos han llegado a bailar de forma profesional en lugares como el Teatro Real o en los más grandes ballets de Europa.
Las redes sociales se han llenado de mensajes de condolencias de alumnos y antiguos alumnos a los que su carácter y disciplina marcó de por vida. Su hija María, también profesional de la danza, está ahora al frente de su academia, donde la actividad continúa entre maillots, resina y zapatillas de ballet, tal como ella hubiera querido.
