Rosario de la aurora por el décimo aniversario de la Coronación

La lluvia obliga a suspender la procesión de la Soledad

El rezo se realizó en el interior del templo y la Dolorosa quedó expuesta en besamanos

Una devota besa las manos de la Virgen de la Soledad, ayer.

Una devota besa las manos de la Virgen de la Soledad, ayer. / Juan Antonio Prior Vicente

Pese a que los hermanos esperaban poder sacar de su ermita a la Virgen de la Soledad para celebrar el rosario de la aurora por el décimo aniversario de la coronación canónica de la patrona de Badajoz el 8 de junio de 2013, la lluvia impidió que la imagen saliera de su ermita. 

Este era uno de los actos centrales del jubileo que se está celebrando por esta efeméride. Tras la suspensión de la procesión, se rezó el santo rosario en el interior del templo, con la Dolorosa aún sobre sus andas. A su término, en torno a las ocho y cuarto de la mañana, la imagen de la patrona fue retirada del paso para ser colocada en el centro del presbiterio, ante un magnífico altar efímero, a la espera de recibir todo el cariño de los fieles en su besamanos. 

La ermita era un ir y venir de devotos que se acercaban para deleitarse con una perspectiva de la Virgen muy poco frecuente en las últimas fechas, pues a causa de la pandemia, la hermandad aún no había recuperado este bello gesto en el que se puede ver con claridad el amor que los pacenses le profesan a su venerada patrona. 

José María Blanco, hermano mayor de la Soledad, comentó que «en los momentos del rosario me he acordado mucho de mi antecesor, Joaquín Gil y lo mucho que disfrutó el día de la coronación»

Ya por la tarde, el arzobispo de Mérida-Badajoz, Celso Morga, ofició una eucaristía en la ermita.