Se buscan libros para llenar la biblioteca del hospital

Las palabras se amontonan en la unidad de Oncología. No es que los pacientes y trabajadores hablen mucho - que también ocurre a veces - sino que en uno de los espacios ha proliferado una biblioteca. «De lo que se trata es de hacer más llevadera la estancia del paciente en Oncología», explica María Manzanedo, la coordinadora general de voluntariado de la Asociación Oncológica Extremeña (Aoex), sobre el proyecto ‘Letras para cuidar’. 

Gracias a estas obras, los pacientes que acuden al hospital de día a recibir tratamiento «pueden sobrellevar el tiempo». En la estantería hay, a día de hoy, más de 300 títulos pero Aoex ha hecho un llamamiento a toda la ciudad para seguir llenando las baldas. Lo que piden es sencillo: novelas de bolsillo «para aligerar el peso y que sea cómodo para los pacientes» que hayan tenido un significado especial para la persona que lo dona. «Se trata de que las historias que lleguen tengan corazón por la razón que sea», dice María. «Aunque lo agradecemos, no queremos que alguien nos de 50 libros. Buscamos que una historia que te haya conmovido llegue hasta ‘Letras para cuidar’ y así ayude a otra persona».

La campaña de recogida ya está en marcha. Aquellos interesados en donar deben llamar o acercarse a la sede de Aoex y preguntar por María. Ella les explicará el proceso y recogerá las obras. «Les pedimos a las personas que vienen a entregar libros que escriban unas palabras sobre la historia antes de dejarlos, así todo es mucho más personal y los lectores pueden sentirse unidos a los donantes de libros si la historia les remueve los mismos sentimientos». 

En honor a una paciente

El programa ‘Letras para cuidar’ surgió a raíz del testimonio de una paciente oncológica en Aoex. «Ella se evadía de su situación con un libro en las manos. Era su forma de desconectar». Sus palabras pusieron en marcha la idea y, poco después, se creó esta biblioteca. «Es amplia, hay variedad de títulos, pero es verdad que lo que nos hace falta son los de bolsillo, los ligeros». Los centenares de títulos están organizados por temáticas para que los usuarios tengan fácil acceso. También están tratando de hacer un muestreo de los gustos de cada uno porque la idea es ampliar el proyecto y conseguir revistas temáticas. «Es lectura rápida para que puedan acceder a ella mientras están aquí recibiendo el tratamiento por la mañana».

De lunes a jueves, los voluntarios de Aoex están pendientes de los préstamos y las devoluciones. Manzanedo señala que, además de prestarlos durante el tiempo que dura el tratamiento en el hospital de día, los pacientes pueden llevárselos a casa para continuar sus lecturas. «En realidad es una forma también de acercarnos a los pacientes. Estamos prestando libros pero también informando de otras actividades que realizamos y fortaleciendo el contacto con ellos».