Una representación de las nueve familias que viven en los antiguos pisos de la Guardia Civil, en la barriada pacense de Suerte de Saavedra, se concentraron en la mañana de ayer frente a la residencia oficial del presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, apoyados por el Campamento Dignidad. 

Las familias reclaman a la Junta que puedan optar, una vez que sean rehabilitadas, a alquilar las viviendas, una posibilidad que ahora se les niega, ya que la Consejería de Vivienda las considera ‘okupas’, a pesar de llevar 10 años solicitando un inmueble. 

María Elena Domínguez, una de las afectadas, explicó que «llevamos seis años viviendo aquí, no hay agua corriente y ya no podemos más». Además, rechazó que estén ocupando las viviendas y afirmó que gracias a ellos, ahora se van a rehabilitar. Del mismo modo critica que se le diga que se vaya de alquiler y que después solicite una vivienda, por lo que pide a la Junta que se haga una lista por orden de solicitantes, ya que ella tiene más derecho que otras personas con menos tiempo de solicitud. 

En una primera fase se va a proceder a rehabilitar 40 viviendas de las 90 que conforman el bloque.