Entre enero y marzo de este año, cinco personas han fallecido en Extremadura en accidentes laborales, un 150% más que en el mismo periodo del año anterior. El dato lo dio ayer Luis Pimienta, de UGT, en la concentración convocada con motivo del Día Internacional de la Seguridad y Salud en el Trabajo a las puertas del ecoparque de Badajoz, donde en enero de este año murió un trabajador tras quedar atrapado en una prensa.

En 2022, en la región se registraron 23.394 accidentes de trabajo, 24 de ellos mortales, lo que supone que de media se accidentaron cada día 64 personas y murieron dos por mes. Servicios, agricultora e industria son los sectores con mayor siniestralidad laboral. 

Para reducir estas cifras, UGT defendió la necesidad de que las empresas afronten la prevención de riesgos laborales «como una inversión y no como un gasto» y se deje de «invisibilizar esta lacra social», por lo que reclamaron a los gobiernos central y autonómico que «la salud laboral sea una prioridad en sus políticas y se aborden con diálogo social y medidas urgentes».

En este sentido, el sindicato reclamó más medios humanos e inversión para que la Inspección de Trabajo pueda cumplir con su función «de vigilancia».

También CCOO, que se concentró ante la sede de la Confederación Regional Empresarial Extremeña (Creex) en Badajoz, planteó reivindicaciones similares. Su secretaria general en Extremadura, Encarna Chacón, recordó que la salud laboral «es competencia de los empresarios y su responsabilidad», mientras que los servicios de prevención son los encargados de evaluar los riesgos en los puestos de trabajo.

Chacón lamentó que en la región se hayan fallecido trabajadores por no disponer de arnés cuando estaban en un andamio o por atrapamientos debido a un fallo en los sensores, unas circunstancias que «no deberían producirse en pleno siglo XIX», denunció. 

La patronal

Por su parte, la Creex defendió que el empresariado de la región «hace los deberes con creces» en relación a la seguridad y la salud en el trabajo y en la prevención de riesgos laborales. En este sentido, su secretario general, Javier Peinado subrayó en que en Extremadura se toman medidas «más allá del cumplimiento del ordenamiento jurídico, que es de por sí muy estricto y coercitivo», por «la gran concienciación de empresas y de la mayor parte de trabajadores», informa Efe.