CONVENIO DE COLABORACIÓN CON LAS HERMANITAS DE LOS ANCIANOS DESAMPARADOS

Fundación CB dona 300.000 euros al asilo de Badajoz para que pueda afrontar obras de reforma

Las monjas pidieron ayuda a Vara y este acudió a la entidad para que colaborara. Los fondos se destinarán a adaptar uno de los pabellones para mejorar sus condiciones y funcionalidad

Vara, sor Elena y Vázquez, tras la firma del convenio de colaboración, este jueves en el asilo de Badajoz.

Vara, sor Elena y Vázquez, tras la firma del convenio de colaboración, este jueves en el asilo de Badajoz. / SANTIAGO GARCIA VILLEGAS

Belén Castaño Chaparro

Belén Castaño Chaparro

Había que acometer obras de reforma para mejorar las condiciones y funcionalidad de uno de los pabellones pero era inasumible hacerlo en solitario. Las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, que gestionan la residencia de Mayores Nuestra Señora de la Soledad, conocida en Badajoz como el asilo, pidieron ayuda al presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, que, a su vez, se puso en contacto con Fundación CB para solicitar su colaboración. No hizo falta insistir. La entidad no solo aceptó la propuesta de inmediato, sino que su patronato incrementó la aportación que inicialmente había sugerido Vara. 

Este jueves, la madre superiora, Elena Rebollo, y el presidente de Fundación CB, Emilio Vázquez, acompañados por el presidente de la Junta, han firmado el convenio de colaboración que permitirá una donación directa de 300.000 euros para costear las obras del pabellón para residentes válidos Virgen de Fátima. Se va a reformar de arriba a abajo para adaptarlo a la normativa vigente en materia de accesibilidad. Durante las obras los residentes se trasladarán a otro pabellón que está libre. 

El asilo cuenta con 180 usuarios, pero las religiosas tuvieran más capacidad económica, podrían acoger hasta 300. Tienen una larga lista de espera, pero ningún caso urgente se deja de atender. Sor Elena agradeció la disposición de Vara «desde el minuto cero» y la de la Fundación CB, sin cuyo apoyo sería imposible llevar a cabo estas mejoras en el centro.

 «En esa fundación de la gente que pregonamos también la gente mayor participa y es un orgullo y una alegría poder colaborar. Siempre estaremos si nos necesitan", ha asegurado Vázquez.

Por su parte, Vara ha señalado que en el asilo se desarrolla cada día «una de las más hermosas historias de amor», que es -ha dicho- la que las monjas reparten a diario entre los residentes, a quienes cuidan, curan, consuelan y acompañan. Pero también existen unas necesidades básicas que hay que cubrir y que en algunos casos no pueden afrontar, pues, como ha recordado el presidente de la Junta, en esta residencia «no se miran las cuentas corrientes, se paga si se puede y si no, no». Por eso, ha defendido, es preciso «hacer ver que esas necesidades están ahí».

Mili social

 En este sentido, Vara ha asegurado que frente a la petición de muchos de que habría que recuperar el servicio militar en España, él propondría «una mili social», para que la sociedad no olvide a los más vulnerables.