turismo sobre dos ruedas

80 ‘Ángeles Guardianes’ van en moto por Badajoz

La ciudad se estrena como sede de este club motero con un encuentro internacional

Ángeles Guardianes en Badajoz.

Ángeles Guardianes en Badajoz. / ANDRÉS RODRÍGUEZ

Irene Rangel

Irene Rangel

La margen derecha del Guadiana olía ayer a gasolina y sonaba a moto. 80 aficionados a las dos ruedas se concentraban a las nueve de la mañana a las puertas del Hotel Río dispuestos a recorer la ciudad. 

Badajoz está siendo durante todo el fin de semana la sede de un encuentro del club de motos internacional Ángeles Guardianes. Este colectivo está destinado a miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad de todos los países del mundo y se dedica a combinar la pasión por las motocicletas con las causas benéficas. «Badajoz no tenía sede así que unos 25 compañeros aficionados al asfalto nos propusimos crearla. Tras cuatro meses trabajando, moteros de todas partes de España vienen a Badajoz a darnos la bienvenida a la asociación» explica Goyo Campos, miembro del grupo.

El grupo aparcó las motos para recorrer a pie el Casco Antiguo.

El grupo aparcó las motos para recorrer a pie el Casco Antiguo. / ANDRÉS RODRÍGUEZ

Los recién estrenados componentes pacenses hicieron de anfitriones ante compañeros llegados de Tarragona, Valencia, Alicante, Águilas, Melilla, Madrid, Guadalajara, Granada, Málaga, Ciudad Real, Huelva y distintos puntos de Portugal.

Visitaron en primer lugar Puerta de Palmas y recorrieron a pie el Casco Antiguo. Tras la visita, y ya subidos en las motos, pusieron rumbo a Elvas y Campomayor, donde tuvo lugar la comida de presentación del nuevo núcleo pacense de la asociación.

Los Ángeles Guardianes recorren Badajoz

Los Ángeles Guardianes recorren Badajoz / ANDRÉS RODRÍGUEZ

Al anochecer volvieron a Badajoz para la celebración de una cena de gala en el hotel donde se alojan.

Hoy los motores siguen sonando en la ciudad ya que, aunque los que vienen de destinos más lejanos han salido temprano de vuelta a casa, el resto del grupo seguirá aprovechando el día en Badajoz.