Con el inicio de las clases a menos de un mes, está por ver si este coincidirá con la obra que se está llevando a cabo junto al parque y al instituto de Castelar como consecuencia del socavón que se produjo el pasado 21 de julio. Ayer comenzaron con el hormigonado de las tuberías fecales, encima van las del agua potable y el resto de los servicios se colocarán en las capas superiores, ya que el hundimiento del suelo provocó que se deterioraran las líneas de electricidad, el alumbrado o los semáforos, entre otros. En este cruce hay muchas conexiones en todos los sentidos y eso puede complicar los plazos de las obras.
Los trabajos de relleno ya están aproximadamente a unos dos metros de la altura de la carretera cuando el agujero que se había creado para el arreglo había alcanzado en torno a los siete metros. Por esta razón. el concejal de Vías y Obras, Carlos Urueña, informó este miércoles de que espera que la obra haya concluido a finales de este mes. Así, detalló que se están poniendo las instalaciones que faltaban y luego tienen que poner la cota. «Si no hay complicaciones en las instalaciones que esperemos que no, la idea es que a final de esta semana y principio de la que viene se puedan terminar y dejar a cota la tierra», especificó. Asimismo, la próxima semana ya echarían el hormigón y dejarían cinco centímetros para la capa de aglomerado asfáltico, que se realizará aprovechando que comienza una campaña en esta materia. En la avenida Santiago Ramón y Cajal lo echarán cuando el hormigón haya fraguado y tenga la suficiente consistencia.
Urueña recordó que este tipo de socavones se produce por una rotura en la red de saneamiento que durante años ha estado perdiendo agua y lavando la tierra y en todas las obras de plataforma única revisan si hay socavones.