Las obras de restauración y puesta en valor del antiguo colegio San Pedro de Alcántara de Badajoz comenzarán el próximo mes de septiembre. Esa es la previsión del ayuntamiento que ya ha adjudicado los trabajos a la Unión Temporal de Empresas (UTE) integrada por Díaz Cubero SA y Al-Senera Obras y Servicios por importe de 2.255.496 euros (casi 245 euros por debajo del presupuesto base de licitación).
En estos momentos, se están ultimando los trámites para elevar la adjudicación a definitiva y proceder a la firma del contrato en agosto, cuando también se aprobará el plan de seguridad y salud. Además, ya está licitado el seguimiento arqueológico. Así lo explicó Blanca Subirán, concejala responsable de los proyectos de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi), a través de la que se financia la actuación para convertir este inmueble del siglo XVI en la nueva sede de la Escuela de Artes y Oficios Adelardo Covarsí.
Las obras tienen un plazo de ejecución de 13 meses y medio, por lo que no es probable que el curso 2023-2024 pueda comenzar, como estaba previsto inicialmente, en su nueva ubicación, ya que tras la rehabilitación habrá que equipar las instalaciones y realizar el traslado de la actual sede, en la parte baja del Palacio de Godoy. El atuntamiento cofinancia esta actuación con un 20%, que será el mismo porcentaje que aporte la Diputación de Badajoz para el equipamiento tras las obras. Así lo acordaron ambas instituciones a finales de 2021, patronas de la escuela, cuando se presentó el proyecto de restauración del también conocido como conventual de San Agustín.
El proyecto de restauración, firmado por AT-Sympro & Projects, contempla la rehabilitación y recuperación del edificio, para rescatar su tipología original, por lo que se eliminarán los añadidos que se han ido realizando en función de los usos que se le ha ido dando a lo largo de los años, y su adecuación para albergar la escuela de artes y oficios. El inmueble está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC) y es parte de lo que resta de un conjunto mayor, el convento de San Agustín, adosado a la iglesia del mismo nombre. Del original, permanecen el templo, el claustro mayor del convento y sus cuatro alas (que es donde se interviene en esta actuación) y un claustro menor.
Con estas obras se recuperarán los elementos genuinos del conventual que se han alterado, que se encuentran en mal estado o incluso se han sido eliminados. Así, se restituirá el claustro, las espacios interiores (bóvedas en planta baja, arcos carpaneles en la primera planta y la escalera Real) y se devolverá a las fachadas su configuración original.
No se cambian las alturas ni el número de plantas del conventual y la ampliación será en tres plantas, por debajo de la altura del edificio histórico. El acceso principal a la escuela estará en la calle Chapín, donde hay un espacioso patio que servirá de antesala a la entrada y al fondo de este se ubica la ampliación, que se conectará con el convento por una pasarela situada a más de seis metros de altura, que servirá de marquesina y portal de entrada. Además, habrá un segundo acceso desde el claustro menor, ya rehabilitado, que se integrará en esta actuación.
Las aulas se distribuirán en espacios lineales, compartimentadas por tabiques en seco, para dar flexibilidad de usos. En la entrada estarán la dirección, la sala de profesores y administración. En la planta baja, se distribuirán las aulas generales (talleres y teoría) y el aula de Diseño y Moda junto a un taller de joyería. Mientras, en la superior se ubicarán el resto de talleres por parejas (Dibujo I y II, Colorido al agua y al óleo). El aula de modelado se ha previsto al fondo, con un área anterior abierta de usos múltiples. En la parte ampliada, irán el almacén y los aseos.
La escuela de artes y oficios lleva años soportando problemas de falta de espacio y la nueva sede permitirá triplicar el espacio del que dispone ahora en el Palacio de Godoy.
