El colector del desagüe de la zona del estanque del parque de Castelar estuvo filtrando agua desde hace años y eso provocó un socavón de grandes dimensiones el pasado 21 de julio, un agujero que se tuvo que ampliar tres o cuatro veces su tamaño para que las máquinas pudieran entrar a trabajar y comprobar el alcance de la rotura de la tubería. Una obra que, cómo mínimo, y según confirmó este lunes el concejal de Vías y Obras, Carlos Urueña, continuará con los trabajos esta semana y la próxima.

El problema desde un principio era conocer si dicho colector estaba dañado y, una vez que eso se comprobó, lo que primero que tienen que ver es si hay algún tramo más afectado, de ahí se que se haya creado un espacio tan grande, puesto que la tubería se encuentra a una profundidad de unos seis metros. Posteriormente, una vez que se ponga uno nuevo, se irán tapando las capas hasta llegar a la calzada.

Urueña aseguró que por ese tubo van al mismo tiempo el agua de saneamiento y de pluviales y la avería no era detectable porque no se trataba del saneamiento principal. También indicó que el servicio de saneamiento está funcionando y resaltó la necesidad de arreglar el problema antes de que llueva y entre todo el agua.

Los operarios ultiman los últimos retoques del hueco de Moreno Zancudo. SANTIAGO GARCIA VILLEGAS

Por otro lado, el socavón que se produjo ese mismo día en la calle Moreno Zancudo por otra avería en la red de abastecimiento, concluyó este lunes. La diferencia entre ambos es que, en este último caso, es más fácil de encontrar la rotura porque sale mucha agua y, si no, se aprecia en los contadores.

El concejal informó de que en todas las obras que realizan para meter el abastecimiento aprovechan para ver si hay algún blandón en la tierra y solventar, de paso, el saneamiento para evitar que ocurra lo de Castelar.