Parece que el Ayuntamiento de Badajoz y la Junta de Extremadura están dispuestos y encaminados a entenderse para sacar adelante el proyecto de construcción de un instituto en Cerro Gordo, que los vecinos de esta barriada llevan reclamando. La Consejería de Educación solicitó al consistorio una parcela de 16.000 metros cuadrados y la respuesta inmediata del ayuntamiento fue que cuando el Gobierno regional diseñó el barrio con un PIR (Proyecto de Interés Regional) reservó un terreno de solo 11.000 metros cuadrados para el futuro instituto, pero existe una zona verde contigua y ambas sumarían 15.800. Una superficie que Educación considera suficiente y así se lo ha transmitido al concejal de Urbanismo, Carlos Urueña. «Nos adaptamos», ha sido la respuesta de la consejería, según ha informado a este diario. El ayuntamiento insiste en que es la única opción, dado que no hay más suelo con la superficie solicitada por la Junta en todo Cerro Gordo. 

El engranaje se puso en marcha el pasado 26 de mayo, cuando el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, anunció que Cerro Gordo tendría instituto. Los vecinos venían protagonizando protestas desde principios de año. Una semana después del anuncio de Vara, el ayuntamiento pacense recibió la petición de una parcela por parte de la Junta.

Urueña ha hablado con el secretario de Educación, Francisco Amaya, que ha mostrado su parecer favorable a la parcela propuesta. Pero ahora queda una cuestión previa por resolver y de la que depende que el proceso de cambio de uso de la zona verde sea más o menos complicado. Según el ayuntamiento, es la Junta la que tiene que modificar el PIR que aprobó en su día para poder anexionar la parcela de zona verde a la de uso educativo. Pero, según la Consejería de Agricultura, Población y Territorio, la competencia de la modificación del PIR es del propio ayuntamiento, porque lo que hay que cambiar es el Plan General Municipal (PGM) y así se lo han trasladado, lo que significa que es el consistorio el que debe realizar el proyecto de modificación.

En el Ayuntamiento de Badajoz no opinan lo mismo. Según Urueña, el PIR lo cambia la Junta. «Otra cosa es que una vez que esté incluido en el PGM sea competencia del ayuntamiento», plantea el concejal. Urueña no cree que se estén pasando la pelota de una administración a otra, sino que solo tienen que aclararlo, pues que la urbanización esté recepcionada por el ayuntamiento no quiere decir que esté incluido en el PGM de Badajoz. En este sentido, apunta como ejemplo que en la Plataforma Logística del Suroeste Ibérico, que también es un PIR, la Junta es la que está aprobando las modificaciones, aunque el ayuntamiento vaya recepcionando la urbanización. En el caso de Cerro Gordo, habría que ver si ya está incluido en el PGM.

Sea como sea no se van a quedar sin resolver la disparidad de criterios. Urueña tiene prevista esta semana una reunión con los técnicos de Urbanismo de la Junta para dilucidarlo. Para el concejal, lo importante no es si compete a la Junta o al ayuntamiento, sino que «estamos de acuerdo en hacer la modificación». Si bien, reconoce que en el caso de que lleguen a la conclusión de que es un PIR, el procedimiento sería «mucho más rápido».