Ya no creen en las promesas de las administraciones y de quienes las representan, ni siquiera en las decisiones y en los pasos hacia adelante de los últimos meses, pues temen que después de tantos años reclamando la creación del Consorcio del Casco Antiguo de Badajoz, esta iniciativa está sufriendo una «situación de bloqueo», según han denunciado a través de un comunicado cuatro asociaciones que trabajan por la revitalización del centro histórico de la ciudad. El escrito está firmado por SOS Casco Antiguo, la Asociación Cívica Ciudad de Badajoz, la de Vecinos del Casco Antiguo y Amigos de Badajoz.
Tras esta queja, tanto el ayuntamiento como la Junta han confirmado su compromiso y que la constitución está expensas de resolver trámites. En concreto, el concejal de Turismo y Patrimonio, Jaime Mejías, manifestó ayer que lo que queda ahora pendiente es «el encaje orgánico», que están viendo los técnicos de las tres administraciones, en materia jurídica, presupuestaria y orgánica. «Va por buen camino», afirmó y quiso destacar que se trata de un proceso «difícil y complicado» en el que los técnicos «están dando el máximo». En todo caso, Mejías subrayó que el acuerdo político y presupuestario entre las tres administraciones existe y que los técnicos municipales se han comprometido a resolver los trámites pendientes «antes de que termine este mes».
En el mismo sentido se expresó la Junta de Extremadura, desde la Consejería de Hacienda y Administración Pública. Según explicó, el Ejecutivo regional remitió al ayuntamiento y a la diputación el convenio y los estatutos para que realizaran las aportaciones y trámites para la constitución del consorcio. En marzo se envió un nuevo documento, que incluía «algunas de las aportaciones de las partes integrantes» y, según la Junta, en estos momentos el ayuntamiento «está analizando el texto del convenio y los estatutos a la espera de un posicionamiento por parte de su Intervención». Una vez que estos trámites concluyan -insistió la consejería- la Junta someterá a aprobación por el Consejo de Gobierno el convenio y los estatutos «para su puesta en marcha lo antes posible».
Costó que esta iniciativa, que empezó a gestarse en 1998, echase a andar. En la actual legislatura el ayuntamiento tiró del carro, la Diputación de Badajoz recogió el guante y la Junta de Extremadura confirmó definitivamente su compromiso en una reunión online que convocó en abril de 2021, hace más de un año. En septiembre se celebró un encuentro en Mérida, ya presencial, en el que avanzaron algunos detalles. Las tres partes se comprometieron a que el Consorcio del Casco Antiguo sería una realidad antes de que terminase 2021, un plazo ampliamente incumplido. En enero de 2022 se hizo público el convenio que la Junta había remitido al ayuntamiento y a la diputación para su aprobación, junto a los estatutos de este futuro consorcio. El Gobierno central ya se había desmarcado y no quería formar parte. En el apartado sobre financiación figuraba que el presupuesto previsto para este año sería de 1 millón de euros, del que la Junta aportaría el 58% (583.000 euros), el ayuntamiento 400.000 y la diputación, 17.000 euros.
"Somos el centro histórico más extenso de Extremadura, el más poblado y el más maltratado"
«Medio año ha transcurrido ya desde que la Junta, la diputación y el ayuntamiento firmaran su compromiso de formar parte del consorcio para la recuperación patrimonial, urbanística y social del Casco Antiguo de esta ciudad», lamentan los cuatro colectivos defensores de este entorno. «Con la firma de este compromiso creímos asistir al final feliz de un deseo mayoritario de nuestra sociedad civil», relatan. «No somos Cáceres ni Mérida, no somos un casco antiguo consolidado, sí somos el centro histórico más extenso de Extremadura, el más poblado y el más maltratado», se quejan. De ahí que se hiciese necesaria la unión de todas las instituciones para que trabajasen «de un modo ágil y coordinado, estableciendo objetivos de actuación». Porque «el problema al que nos enfrentamos es demasiado grande como para que nuestro ayuntamiento en solitario, pueda dar solución a estas calles». Escucharon «su petición de auxilio» y se dieron pasos, aunque la Delegación del Gobierno «nos dio la espalda», apuntan en su escrito, al tiempo que recuerdan que el resto de administraciones aprobaron dotaciones presupuestarias «con las que alimentaron lo que, a día de hoy, es solo un titular y una quimera».
