Un preso del centro penitenciario de Badajoz fue hallado sin vida la madrugada de este martes en su celda. El interno tenía 33 años y todo apunta a que se trata de un suicidio por ahorcamiento, aunque Instituciones Penitenciarias está a la espera de la confirmación oficial de la causa del fallecimiento, tras dar traslado de los hechos al juzgado, que se ha hecho cargo de la investigación.
El cadáver del joven fue hallado sobre la una de la madrugada de este martes y no se pudo hacer nada ya por salvar su vida.
Fuentes penitenciarias han informado que se trabaja con la hipótesis del suicidio, por lo que se ha abierto una información previa, para analizar las posibles causas y desencadenantes. Este es, según recuerdan el proceso habitual que se sigue en los casos de suicidio en las cárceles, y los datos que se recaben se trasladará a la comisión multidisciplinar de la Secretaría de Instituciones Penitenciarias, en la que representantes de los ámbitos de la sanidad, el tratamiento y la seguridad analizarán qué ha ocurrido y si procede introducir cambios en los protocolos establecidos o en las actuaciones encaminadas a la prevención de suicidios.
Esto no es suficiente para la plataformas de familiares de presos muertos en prisión, cuya representante en Badajoz, Pamela Aparicio de la Peña, cuestiona la efectividad de los protocolos antisuicidos en las cárceles y reclama que se investigue y aclare este y otros casos, "no que se archiven, como ocurre ahora", denuncia. Ha sido este colectivo el que ha hecho público el fallecimiento del interno de la cárcel pacense "porque las familias queremos que se sepa, porque una muerte es muy grave", señala. En este sentido, recuerda que la "lucha" de la plataforma es que "las cosas cambien y se respeten los derechos humanos en las prisiones". Para que dar visibilidad a su reivindicación, tienen prevista una concentración el próximo mes de septiembre en varias ciudades de España, entre ellas, Badajoz.
