Los conductores que circulan por Badajoz se han acostumbrado y han cedido a la presencia de los denominados radares pedagógicos, que son esos paneles con dígitos que informan de la velocidad a la que se circula y alertan cuando se supera, pero no sancionan. Los primeros se colocaron en julio de 2020. Fueron cinco y, tras demostrarse su eficacia, el ayuntamiento instaló ayer otros 8 y tiene previstos 16 más, según informó la concejala de la Policía Local, María José Solana.

Una vez finalizada la instalación habrá 29 vías de Badajoz con estos dispositivos de control de la velocidad. Para Solana, se trata de un sistema que cambia el concepto porque no tiene carácter coactivo sino de concienciación «y hace que todos sepamos cuál debe ser nuestro comportamiento en la carretera sin necesidad de que haya una multa».

Los cinco primeros se instalaron en la avenida de Entrepuentes (sentido Puerta Palmas), Juan Sebastián Elcano con Lucas Vázquez Ayllón (sentido avenida Diario Hoy), Adolfo Díaz Ambrona (hacia Adolfo Suárez), Jaime Montero de Espinosa (sentido Sinforiano Madroñero) y en el puente de la Universidad. En los cuatro primeros se ha demostrado «claramente» que a partir de ese momento, por los resultados que recogen, ha disminuido la velocidad en estos tramos. Pero uno de ellos, el del puente de la Universidad, no ha dado los resultados esperados, por lo que el ayuntamiento ha decidido adoptar otra medida y lo sustituirá por un radar fijo, de los que sí sancionan. El pedagógico que se va a retirar se trasladará a la avenida de Los Colonos, en Villafranco del Guadiana. Con una partida de 69.700 euros se van a adquirir dos cabinas y un radar fijo, que se irá alternando. La otra cabina se colocará en la avenida Luis de Góngora, en Cerro de Reyes.

Los ocho radares que se instalaron ayer y que están pendientes de la conexión eléctrica se han situado en el paseo Fluvial (hacia la glorieta de Juan José Venero), avenida del Perú (sentido Sinforiano Madroñero), avenida de la Independencia (hacia el centro de salud de Cerro Gordo), María Auxiliadora (hacia carretera de Olivenza), Fernando Calzadilla a la altura de las Clavelinas (sentido Damián Téllez), carretera de Valverde (hacia la entrada de la ciudad), Sinforiano Madroñero (junto al restaurante Gladys) y en la calle Luis Chamizo, hacia El Nevero.

En el plan de inversiones se ha previsto otros 16. Se colocarán en la avenida de la Independencia (sentido carretera de Talavera la Real), Sinforiano Madroñero (tras Antonio Pesini, sentido puente Real), Pedro de Alvarado (hacia avenida de Elvas), en el puente Real (hacia la glorieta de José Miguel Benegas, pasado el radar fijo), el puente de la Autonomía (sentido salida de la ciudad), dos en Adolfo Suárez (sentido Adolfo Díaz Ambrona en la curva de Marchivirito y tras pasar Legado de Macías) y en Manuel Rojas (hacia carretera de Madrid). También en Ricardo Carapeto (antes de Eugenio García Estop), Felipe Trigo (pasado Olof Palme), Vicente Marcelo Nessi (sentido Pablo Neruda), avenida de Colón (después de los juzgados), Carolina Coronado (hacia el puente de Palmas, pasado Rey Mudafar), Padre Tacoronte (pasada calle Zapata), José María Alcaraz y Alenda (sentido Tomás Romero de Castilla pasada Jacinta García Hernández ) y en la calle Nuestra Señora de Guadalupe de Gévora.

Según los datos facilitados por Solana, todos los radares pedagógicos, instalados en vías con velocidad máxima establecida a 50 kilómetros por hora, han registrado una velocidad media inferior al límite permitido. Su eficacia se ha demostrado porque se han reducido los siniestros en los tramos donde están colocados y porque la velocidad de los vehículos que circulan en el sentido de la marcha donde están situados, es inferior a la del contrario.

Así, por ejemplo, en el radar instalado en la avenida de Entrepuentes, la velocidad media de aproximación al radar (sentido Puerta Palmas) es de 41,11 kilómetros por hora, mientras que en sentido contrario es de 46,49 kilómetros por hora. Por fracciones de velocidad, en el sentido en el que está situado el radar, el 88,88 % de los vehículos no exceden el límite, el 10,56% circulan en el intervalo entre 51 y 70 y un 0,52% pasa los 70 kilómetros hora. Sin embargo en el sentido contrario, desde el que no se ve el panel con los dígitos, el 71,07% de los vehículos respetaron el límite, mientras que el 28,03% circulaba con exceso de velocidad.

Solana destaca que la concienciación en materia de seguridad vial ha permitido que en Badajoz solo hubiese un fallecido en 2021 por accidente de tráfico. «Cuando entre todos hacemos las cosas como se deben hacer, al final, si tiene que suceder será porque no puede evitarse», defiende.