Nuevo ataque a las cámaras de videovigilancia del Casco Antiguo de Badajoz. Esta vez, se han causado daños al dispositivo instalado en la esquina de las calles El Brocense y San Lorenzo, junto al Instituto Municipal de Servicios Sociales, que ha amanecido con la carcasa derretida tras haberle prendido fuego. A pesar de los destrozos la cámara sigue funcionando, según ha confirmado la concejala de Policía Local, María José Solana.
Hace solo unos días, la Policía Nacional ya detuvo a un hombre de 56 años acusado de destrozar la cámara de videovigilancia ubicada en la confluencia de las calles Sepúlveda y Amparo a golpe de martillo. Provocó destrozos valorados en 1.300 euros. En este caso, se valió de una escalera para alcanzar el dispositivo y trató de ocultar su rostro con una sábana y una gorra, pero la propia grabación llevó hasta él. En este último ataque, también se ha grabado al autor de los hechos, unas imágenes que acompañarán a la denuncia que el responsable de la empresa que instaló estos dispositivos (aún no están recepcionados) interpondrá ante la Policía Nacional.
Solana ha asegurado que estos actos demuestran que las cámaras de videovigilancia están cumpliendo su misión, "porque van a por ellas". En este sentido, la concejala de Policía Local ha apuntado que tienen sospechas claras de que detrás de estos ataques no están solo las personas que los cometen, sino que los perpetran siguiendo las órdenes de los presuntos traficantes de droga, quienes ven amenazada su actividad ilícita por las presencia de estos dispositivos, contra los que las policías local y Nacional también va a actuar.
La concejala aseguró que por muchos ataques que sufran las cámaras no se van a retirar, al contrario, la intención del ayuntamiento es ampliar su número para extender la cobertura del Casco Antiguo. Ahora, con 8 dispositivos instalados se controlan 26 vías.
Estos daños se suman a otros sufridos por las cámaras de videovigilancia incluso antes de que se pusieran en funcionamiento a finales del pasado mes de abril. La de la calle Concepción Arenal fue robada y también trataron de cortar los cables a la colocada en la calle Bravo Murillo.
