Una alcazaba libre de macrofiestas. Es lo que pide la Asociación Amigos de Badajoz, quien considera que elegir como escenarios de actividades multitudinarias el principal monumento de la ciudad es un «error que acarrea consecuencias muy negativas» para el patrimonio histórico. 

El colectivo mostró su rechazo a este uso del recinto después de que se haya anunciado que la fiesta de Los Palomos regresa, tras dos años, a sus ubicaciones habituales, una de ellas la alcazaba, donde se celebrarán conciertos el 4 de junio. La asociación recalcó que «apoya y comparte» los fines de esta celebración, de cuyos beneficios económicos y de promoción son conscientes, pero consideró una decisión «incongruente» permitir que se desarrolle en la alcazaba, cuando se han adoptado medidas como su cierre las noches de los fines de semana para poner coto a los actos vandálicos que se producen.

En este sentido, argumentó que para Los Palomos tiene que acceder una grúa de gran tonelaje para montar el escenario, con el riesgo de que se destruyan o dañen elementos y estructuras, mientras que las «vibraciones» de miles de personas en la explanada suponen un «ataque» a la precaria situación de las ermitas. Amigos de Badajoz insta al ayuntamiento a que recapacite sobre la celebración de esta macrofiesta en la alcazaba y se pone a disposición del consistorio, la Junta y el colectivo LGTBI para buscar otras ubicaciones.