Las obras para rehabilitar el antiguo colegio San Pedro de Alcántara, anexo a la iglesia de San Agustín, y convertirlo en la nueva sede de la Escuela de Artes y Oficios Adelardo Covarsí ya tienen fecha: verano de 2022. Este es el plazo que maneja el Ayuntamiento de Badajoz para iniciar los trabajos, después de que hace tres semanas recibiera el proyecto de la empresa AT-Sympro Services & Projects SL , a la que se adjudicó, junto con el estudio de seguridad y salud y la dirección de obras por casi 93.000 euros.

El proyecto, según explicó el concejal de Gabinete de Proyectos, Jaime Mejías, es el pliego técnico y desde su área se está trabajando en el administrativo, para tener el expediente completo y poder licitar las obras antes del 15 de marzo. En este sentido, recordó que esta actuación, con un plazo de ejecución de 16 meses, se financia con fondos de la Estrategia de Desarrollo Sostenible e Integrado (Edusi), que tienen como fecha límite para agotarlos finales de 2023, por lo que es muy importante agilizar lo máximo posible los trámites, «pues ya vamos un poco ajustados», reconoció Mejías.

La inversión prevista es de 2,2 millones de euros. El 80% de fondos europeos y el 20% aportado por el ayuntamiento. Este mismo porcentaje será el que destine después la Diputación de Badajoz para su equipamiento y puesta en marcha, según el acuerdo al que llegaron ambas administraciones en julio de 2020. 

Visto bueno de Patrimonio

El proyecto para recuperar el antiguo colegio San Pedro de Alcántara ya cuenta con el visto bueno de la Dirección General de Patrimonio y el ayuntamiento ha contratado los servicios de un arqueólogo para que antes de iniciar las obras presente una memoria arqueológica, que también se deberá remitir a la Junta para su aprobación. 

El edificio, también conocido como el conventual de San Agustín, data del siglo XVI y está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC). Sobre la posibilidad de que aparezcan vestigios arqueológicos, Mejías reconoció que por su condición de convento, antes de ser colegio, no se descarta que puedan salir a la luz tumbas en el patio central descubierto que existe. «Lo habitual es que se enterrase en este lugar a los clérigos y personas importantes relacionadas con el convento», apuntó el concejal.

La nueva sede de la Escuela de Artes y Oficios, en la actual ubicada en los bajos del Palacio de Godoy tiene problemas de espacio desde hace años, contará con una decena de aulas y talleres: polivalente, de modelado, de talla, de procedimientos escultóricos en metal, joyería, colorido al agua, colorido al óleo, dibujo artístico (2), y de moda y diseño, con una superficie de 120 metros cuadrados todas, salvo la de joyería, con 60. Además, tendrá un espacio de trabajo al aire libre, que utilizarán todas las especialidades, de 120 metros cuadrados, con zonas diferenciadas, cubierto para protegerse de las inclemencias del tiempo y con área de carga y descarga. 

La futura sede se dotará de biblioteca, para dar cobijo a elevado volumen de ejemplares de «gran valor» y de temática de las especialidades que se imparten, así como con un salón de actos de 160 metros cuadrados y una sala de exposiciones para albergar muestras de pintura, escultura. Estos servicios se completarán con tres almacenes, el despacho de dirección, la sala de profesores, el departamento de administración, aseos y zonas de taquilla.

Mejías destacó que la recuperación del antiguo colegio San Pedro de Alcántara, entre las calles Chapín (por donde tendrá el acceso principal) y José Lanot, supondrá un «revulsivo» para esta zona del Casco Antiguo, además de mejorar las condiciones en la que alumnos y docentes de la Escuela de Artes y Oficios desarrollan su trabajo. «Le dará mucha vida a esta parte de la ciudad, sobre todo a la calle Chapín, y eso es lo que queremos al final: revitalizar el Casco Antiguo ».