El incremento de la incidencia del coronavirus no se ha llevado por delante la Cabalgata de los Reyes Magos en Badajoz, pero sí que ha obligado a introducir algunos cambios. Tal y como anunció el alcalde la semana pasada, este año no tendrá lugar la tradicional recepción a Melchor, Gaspar y Baltasar en el templete de la música del paseo de San Francisco con el objetivo de que no se produzcan concentraciones en este sitio. En su lugar, los Reyes realizarán este saludo al principio, cuando lleguen a la estación de tren, sobre las cinco de la tarde. Para que nadie se lo pierda, será retransmitido en directo a través de los diferentes perfiles del ayuntamiento en redes sociales.

El final del desfile, por tanto, se traslada al entorno de Puerta de Palmas atravesando previamente Pedro de Valdivia, la avenida Juan Carlos I y Prim. Estas modificaciones provocan que el recorrido se amplíe más de un kilómetro, aunque la duración será parecida a la de otros años, alrededor de unas tres horas, puesto que se intentará hacer las menores paradas posibles. El resto del recorrido hasta Ronda del Pilar es exactamente igual que en ocasiones anteriores: estación de tren, Carolina Coronado, puente de Palmas (donde no podrá haber público), Entrepuentes, Santa Marina, Enrique Segura Otaño, plaza de la Constitución y avenida de Europa.

En todo el trayecto habrá vallas y un cordón de seguridad que impedirán que los pacenses se acerquen a las carrozas. En ese sentido, aprovechando la ampliación de la ruta, la edil ha recomendado a la ciudadanía que no se amontonen en zonas más estrechas como Carolina Coronado o Santa Marina y que se dividan por otros lugares para así garantizar la distancia de seguridad entre núcleos de personas no convivientes.

La concejala de Cultura, Paloma Morcillo, ha desgranado esta mañana los detalles de una cabalgata compuesta por 300 niños repartidos entre 12 carrozas y cinco pasacalles. En un principio se habían anunciado 13, pero finalmente Correos ha decidido retirarse debido a circunstancias sanitarias que les impedían participar con seguridad. Sumando los monitores, los auxiliares y las fuerzas de seguridad, en total participarán en la cabalgata unas 600 personas. Los más pequeños están citados a las cuatro menos cuarto en la calle Pedro de Alvarado, donde no podrán acceder sus padres por motivos sanitarios. Se les colocará una pulsera de seguridad y empezarán el desfile sobre las 17.30. A las 20.30, podrán volver con sus padres, que los recogerán entre el puente de Palmas y el Real.

Los ayudantes de Melchor, Gaspar y Baltasar serán, respectivamente, el policía local jubilado Juan José Parra, el pintor Ramón de Arcos y, como ya es tradicional, Jorge Mendoza. En esta edición, sin embargo, no repartirán caramelos, ni ellos ni ningún otro participante, todo con el objetivo de evitar que la gente se amontone.

Además, este año también se mantiene el tramo sin ruido para que los niños con dificultades puedan disfrutar sin problemas de la visita de sus Majestades de Oriente y que ya se estableció en la última cabalgata que se celebró antes de la pandemia. Así, el próximo 5 de enero, las sirenas y los equipos de sonido se apagarán mientras la comitiva real recorre Entrepuentes.

Uvas infantiles y roscón

Salud Pública no ha prohibido ni la fiesta infantil de Nochevieja ni el reparto de roscón, por lo que el ayuntamiento sigue adelante con ambas celebraciones. En el caso de las uvas, solo estará permitido quitarse la mascarilla durante el tiempo que duren las doce campanadas.

El 5 de enero, como ya se dijo, no se repartirá ni chocolate ni papeletas para el típico sorteo con regalos. Se recomienda que las personas que vayan a por una de las 8.000 porciones de roscón, incluyendo raciones especiales para celíacos y diabéticos, se la coman en casa o en otro lugar donde se respeten los 1,5 metros de distancia. Los puntos de recogida, que funcionarán de 10.00 a 14.00 horas, serán tres jaimas ubicadas en distintos puntos del paseo de San Francisco. Lo que sobre se entregará a comedores sociales.