Estudiantes de la Residencia Universitaria de Badajoz (RUCAB), centro en el que se alojaba Pablo Sierra, cuyo cuerpo sin vida ha sido hallado en el río Guadiana, han depositado velas encendidas ante el Instituto Anatómico Forense, lugar al que se ha sido trasladado el cadáver del joven. Alrededor de una veintena de compañeras y compañeros de Pablo de la residencia se han acercado hasta este lugar para expresar su dolor por la muerte de este joven estudiante de Matemáticas de la Universidad de Extremadura (UEx), que desapareció el pasado 2 de diciembre.

Allí han depositado velas encendidas en señal de duelo y de recuerdo por el joven, y han evitado hacer declaraciones a los medios de comunicación. La línea de investigación "más consistente" sobre la muerte del joven Pablo Sierra, cuyo cadáver ha sido hallado este viernes en el río Guadiana, apunta a "un fatal accidente", si bien los cuerpos y fuerzas de seguridad mantienen abiertas el resto de posibles causas a la espera del resultado de la autopsia.