Las dificultades en el suministro de materiales de construcción también está afectando a la obra de renovación del pavimento de la céntrica plaza de Conquistadores de Badajoz, que debería haber terminado antes de Navidad pero se retrasa dos meses, que es la prórroga que ha solicitado al ayuntamiento la empresa adjudicataria, Construcciones Ojalma SL, según ha explicado el concejal de Vías y Obras, Carlos Urueña.

Las obras, que abarcan 4.600 metros cuadrados de superficie, en la parte central de la plaza y el acceso por la calle Enrique Segura Otaño, comenzaron a finales de agosto con un plazo de ejecución de cuatro meses. Con esta actuación se quiere dar solución a los problemas de hundimientos que presentaba el pavimento debido a la diferencia entre el forjado del parking y el terreno, que ya se han subsanado. El mal estado de los sumideros había causado filtraciones de agua en el aparcamiento subterráneo. El ayuntamiento oXWBAWA quiso dar prioridad a esta actuación para no causar perjuicios ni molestias a los negocios del entorno y a los clientes en las fechas más próximas a la Navidad, cuando se incrementa la actividad social y comercial. Los trabajos comenzaron por la parte más deteriorada de la plaza, la central.

Urueña explica que la constructora ya ha pedido una prórroga de dos meses porque, «como está ocurriendo en las obras», han tardado casi dos meses en enviarles el material, que no son adoquines prefabricados de hormigón, sino de barro cocido (como los de la calle del Rincón Nazarí, pero blancos y negros en lugar de rojos), que suministran pocas empresas. El responsable de Vías y Obras aduce que son mucho más resistentes.

Ya está abierta una parte de la plaza con el nuevo pavimento, la que permite el acceso a El Corte Inglés por la puerta que da a la plaza, de la que se ha despejado la mitad. La otra mitad está aún cerrada con las vallas que rodean la obra. La idea, según el concejal, es completar «lo máximo» que se pueda y que a medida que se vaya terminando se vaya abriendo para que la actividad en la plaza pueda ser lo más normal posible. Al finalizar, habrá que limpiar todo el suelo, que ahora está blanquecino por el polvo del mortero de las juntas. Puede que se vaya eliminando con el propio uso.

Urueña confía en que se termine la parte central entera antes de las fiestas, pero si no es posible, «quedará un tramo pequeño» . Durante el periodo festivo seguirán trabajando, aunque lo harán de manera que no interfieran en el trasiego de la gente ni en la actividad de los negocios. «En Navidad la obra no va a estar terminada entera pero casi, y no va a molestar», asegura Urueña, quien señala que la superficie donde se está actuando no tiene por qué molestar a los bares, pues en la zona que ocupan las terrazas no se va a actuar. Sí ha interferido en el espacio del que disponen los niños para corretear, «pero todas las obras tienen molestias», apunta.

El nuevo adoquín también se colocará en la salida hacia Segura Otaño, donde se quitará el 'pipicán'

Ya se han podido instalar atracciones de feria en la parte superior y un árbol luminoso en forma de cono, junto al acceso peatonal y el ascensor que conduce el párking. En esta zona, algunas placas del pavimento que estaban mal se han cambiado. Es lo mismo que se hará en el tramo de la farmacia y la cafetería El Corcho, donde se arreglarán las losetas con desperfectos. Como se levantarán solo las placas estropeadas, no afectará a los veladores ni al cerramiento rígido de este negocio. Sí se colocará un nuevo pavimento de adoquín en la salida hacia Enrique Segura Otaño, donde desaparecerán los alcorques de tierra en los que ahora hay árboles (que se conservarán) y se eliminará el ‘pipicán’ para aprovechar estos espacios.

Trabajadores afanados en la colocación del nuevo suelo de la plaza. S. GARCÍA