El Badajoz se está habituando a contar con varios efectivos de la cantera en las convocatorias del primer equipo. Bien es cierto que en ello hay una elevada dosis de necesidad, teniendo en cuenta la exigua nómina de integrantes disponibles de la que ha tenido que Óscar Cano durante varios compases de la temporada, pero el preparador granadino es poco sospechoso de incluir estos nombres en la lista simplemente para cumplir con la formalidad de tener su expedición completa después de ser un habitual en las gradas del Eusebio Bejarano para seguir la trayectoria del filial.

La confianza del técnico blanquinegro en las promesas blanquinegras parece cuanto menos sincera en un club al que en los últimos tiempos le ha costado proyectar sus jóvenes talentos al primer equipo. En la presente temporada, Josema Gallego consiguió gozar incluso de una titularidad en Primera RFEF ante el Dux Internacional, mientras que varios de sus compañeros también han dado un paso hacia adelante al estar presentes en las convocatorias de Óscar Cano. Este es el caso de David Calles, Narváez, Abraham, Barragán o de Víctor Fernández, quien el último fin de semana ha vivido unos días maratonianos viajando a Salamanca para el choque ante Unionistas y destacando en el filial con un gol que permitió sumar un nuevo punto que le deja fuera de los puestos de peligro. 

«El fin de semana no ha ido mal, pero podría haber ido mejor. Si hubiéramos ganado habría sido diferente, pero estoy contento por las convocatorias que estoy teniendo últimamente con el primer equipo», declara Fernández. Aunque en lo personal fue una experiencia inmejorable para este habilidoso extremo, a nivel colectivo, el guion se repitió: ninguno de los dos equipos pudo conservar la renta lograda durante el choque y tuvieron que conformarse con un punto cuando los tres ya parecían encarrilados. «Son dos empates que te causan algún remordimiento por dentro, pero con las buenas semanas que estamos haciendo los resultados mejorarán», sostiene.

El Badajoz B se está recuperando de un complicado inicio en su vuelta a la categoría nacional. Tras ocho encuentros sin conocer la victoria, acaba de encadenar siete puntos de los últimos nueve que ha disputado tras los triunfos frente a Extremadura B y Don Álvaro y las tablas frente al Arroyo. «El trabajo que se está haciendo con el filial es digno de admirar», asegura el extremo. Pese a que aún no ha tenido minutos con el equipo de Óscar Cano, sus buenas actuaciones en Tercera pueden ser sus mejores credenciales para terminar de dar ese tan ansiado salto. Sus cuatro goles, su verticalidad y su descaro juegan en su favor para convencer al entrenador.