El empresario sevillano y expresidente del Club Deportivo Badajoz, Joaquín Parra, invirtió presuntamente más de 3 millones de euros procedente del fraude del IVA en la venta de hidrocarburos en la reforma y acondicionamiento del estadio Nuevo Vivero. Es lo que sostienen los investigadores de la operación Benzinium, llevada a cabo por la Guardia Civil y la Agencia Tributaria, con la que se ha esclarecido una estafa superior a los 13 millones de euros y desarticulado una organización criminal con la detención de 17 personas, entre ellas el máximo accionista del Badajoz, arrestado el pasado 27 de julio tras el registro de las oficinas del club blanquinegro y la sede de la empresa Extrem Petrol, en la plaza de España, vinculada al empresario sevillano, de la que los agentes se llevaron ordenadores y documentación.

La investigación se inició el año pasado, cuando se detectaron varios impagos y anomalías en las autoliquidaciones del IVA de una empresa dedicada a la venta al por mayor de hidrocarburos, lo que provocó que la Fiscalía de Delitos Económicos de Málaga abriera diligencias sobre los hechos. Tras una «complicada» investigación, los agentes lograron identificar un conjunto de cinco empresas dirigidas por un grupo de personas coordinadas entre sí que habrían tejido un entramado societario destinado a eludir el pago correspondiente al 21 % de IVA que previamente sí cobraban a los clientes a los que le vendían los hidrocarburos. Para evitar ser relacionados con este fraude, los responsables registraron documentalmente estas empresas a nombre personas de confianza que participaban activamente en el fraude, según informaron fuentes de la Guardia Civil.

Estas cinco empresas habrían dejado de ingresar en las arcas públicas durante el ejercicio fiscal 2020 más de 13 millones de euros, cantidad correspondiente al IVA de la venta de más de 63 millones de euros de combustible. Las medidas judiciales aplicadas por el Juzgado de Instrucción número 6 y por la Fiscalía especializada en delitos económicos de Málaga, permitieron localizar a los verdaderos perceptores de los beneficios ilícitos y seguir la trazabilidad de los fondos defraudados hasta su inversión final en diferentes bienes y servicios que disfrutaban los investigados.

La investigación también ha logrado descubrir la existencia de un supuesto delito de blanqueo de capitales, ya que se detectó el desvío de fondos a un conglomerado de empresas pantalla, alguna de ellas ubicadas en el extranjero. El dinero defraudado era utilizado para que los detenidos llevaran un altísimo nivel de vida sin ningún tipo de privación, destacando la compra de gran cantidad de vehículos e inmuebles de lujo. 

Una de las inversiones en las que se utilizó el dinero defraudado, según fuentes de la investigación, es el desvío de más de 3 millones de euros al Club Deportivo Badajoz, dinero que podría haber facilitado la gran reforma del estadio Nuevo Vivero que se acometió durante los primeros meses del mandato de Joaquín Parra, que ha sido sustituido al frente del club por su hijo.

Una vez que se determinaron los responsables de los delitos y donde habían desviado el dinero defraudado, se procedió a realizar, previa autorización judicial, 17 registros domiciliarios en las provincias de Málaga, Sevilla, Badajoz, Madrid y Cádiz, donde se intervinieron 30 vehículos de lujo y 2 yates, embargándose 36 viviendas, todo ello con el objetivo de recuperar el dinero defraudado de manera que pueda ser repuesto a la Administración Pública. Igualmente se han precintado y embargado preventivamente 6 estaciones de servicio ubicadas en las provincias de Ciudad Real, Córdoba, Badajoz, Cáceres y Valencia que eran propiedad de los investigados.

Esta investigación ha sido desarrollada por agentes pertenecientes a la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga y por funcionarios del área de inspección de Sevilla, Málaga y Badajoz de la Agencia Tributaria, apoyados por personal de las comandancias de la Guardia Civil de Sevilla, Badajoz, Cáceres, Madrid, Valencia y Córdoba.

En un primer momento, se informó de que en la operación se había detenido a cinco personas, aunque solo Parra, que fue arrestado en su localidad natal, el municipio sevillano de Dos Hermanas, fue enviado a prisión provisional, comunicada y sin fianza por el juez ante el riesgo de fuga. Desde entonces, permanece en la cárcel malagueña de Alhaurín de la Torre.

Joaquín Parra, expresidente del CD Badajoz. S. GARCÍA

Cuando el empresario fue detenido también se precintaron gasolineras supuestamente de su propiedad: la estación de servicio Derby, en Badajoz, y otras ubicadas en Navalvillar de Pela y Navalmoral de la Mata. La firma Derby era entonces la principal patrocinadora del CD Badajoz, en cuya equipación ya no aparece su logo.

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía confirmó en los días posteriores a su detención --el juzgado decretó el secreto de sumario-- que el empresario estaba siendo investigado por los presuntos delitos de blanqueo de capitales, contra la Hacienda Pública y falsificación de documentos.

La detención de Parra suscitó incertidumbre en el seno del club y los aficionados. El primero se desvinculó por completo de caso desde un primer momento y los segundos cerraron filas en torno al equipo. El arresto del presidente del Badajoz y su principal valedor se produjo cuando se estaba negociando la cesión de las instalaciones del Nuevo Vivero al club, en el que ambas partes llevaban años trabajando y que, por el momento, ha quedado en el aire.