El hijo de María y Raúl quiere seguir jugando en el parque infantil de la barriada de Llera de Badajoz, pero se hace de noche y sus padres prefieren volverse a casa. ¿El motivo? La oscuridad que se cierne sobre él debido a la falta de iluminación. Solo cuenta con dos farolas que se colocaron hace tiempo para alumbrar las pistas de petanca. El resto se queda sin luz todas las noches, y ahora, con el cambio horario, todavía más temprano.

«He hablado varias veces con Jesús Coslado -el concejal de Parques y Jardines-, y me confirmó que estaba en proyecto, pero todavía no me ha dado una fecha con seguridad», explica Jesús Luengo, presidente de la asociación vecinal. Incluso ha propuesto al ayuntamiento colocar un foco de forma provisional, pero le dijeron que no proporcionaría la iluminación suficiente. En su día, agradeció al edil que colocasen un par de juegos nuevos, pero consideran que también merecen que les instalen suelos de caucho al igual que ocurre en otros parques de la ciudad.

Aceras y asfaltado de la barriada pacense

Luengo asegura que lleva por lo menos desde 2015 detrás tanto de esta mejora como de la reparación de las aceras y las carreteras de la barriada. Afirma que hace años que no se actúa sobre ellas: «Las aceras son de la prehistoria y las calles solo hay que verlas. Nos damos cuenta de que en otros barrios están interviniendo, y Llera se siente un poco abandonada».

Jesús Luengo señala una de las aceras del barrio que peor estado presenta. S. García

El concejal de Vías y Obras, Carlos Urueña, confirma que tienen la intención de actuar el próximo año en ambos sentidos. Todavía no tienen definidas calles en concreto, pues es algo que quieren hablar antes con los vecinos «para atender sus necesidades más inmediatas».

Coslado, por su parte, no recuerda que Luengo le haya pedido luces para el parque, pero, tras enterarse a raíz de la consulta de este periódico, se compromete a llamarlo para que le explique la problemática, manifestando estar «encantado» de colocarlas una vez lo escuche.

Aunque, dada su visibilidad, estas son las necesidades aparentemente más urgentes que tiene la barriada, el presidente no quiere dejar de recordar también la falta de un local para poder llevar a cabo actividades con los vecinos. Solicitó al ayuntamiento poder utilizar el centro de día de Llera que Cruz Roja ocupó hasta junio del 2020, al menos hasta que le diesen un uso ahora ya definido (acogerá a usuarios con alzhéimer y otros dependientes a través de la gestión de Afaex), pero se lo negaron. «Me llaman monitores de sevillanas, de aeróbic, de gimnasia... pero aquí no tenemos sitio», lamenta.