Programación o lenguaje computacional son términos que, a priori, no suele conocer un niño de 11 años, salvo si exceptuamos a los que forman parte del proyecto ‘Aprendemos juntos’ desarrollado por la asociación YMCA en Badajoz. En ese caso, no solo los conocen al dedillo, sino que, además, saben llevarlos a la práctica de una forma sorprendente para su edad.

Para luchar contra el absentismo y el fracaso escolar, esta organización decidió emplear la metodología STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés). Concretamente, la iniciativa ha consistido en crear desde cero unos robots que ellos mismos montaban y programaban informáticamente para después trabajar las asignaturas de clase «mediante problemas reales de la vida», cuenta el director de YMCA en Badajoz, Mariano Enrique.

De esta forma, añade, además de aumentar la motivación de los más pequeños en cuanto a la educación se refiere, también se reduce la brecha digital que existe en función de las características personales de cada uno.

Los resultados han sido tan positivos, que el programa deja este año de ser piloto para pasar implantarse en las sedes que YMCA tiene en Teruel, Valencia, Logroño y Valladolid.

Premiados

El origen de todo se encuentra en 2019, cuando la asociación pacense decidió presentar este proyecto a la convocatoria de subvenciones de acción social de Fundación la Caixa en la línea orientada a lucha contra la pobreza infantil.

No solo les concedieron la ayuda, sino que, poco después, les proclamaron, entre más de 600 participantes, segundos ganadores de uno de los diez premios de innovación social que este miércoles recogieron en Madrid de la mano de la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño.

Recibieron un trofeo y 15.000 euros que reinvertirán en el proyecto para que más niños pacenses tengan la oportunidad de de formarse de una forma diferente y, sobre todo, divertida.