Nuevo paso para que la futura sede social y centro cultural de la Fundación CB se traslade al corazón del Casco Antiguo de Badajoz. La Dirección General de Patrimonio de la Junta de Extremadura acaba de dar el visto bueno al proyecto básico y, con este trámite salvado, el patronato, máximo órgano de gobierno de la entidad, aprobó este miércoles, por unanimidad, la inversión para construir el edificio, que se levantará en una parcela entre la puerta del Capitel y la plaza de Santa María.

Aunque oficialmente no se ha concretado el presupuesto, por las cifras ofrecidas desde que se anunció esta actuación, la construcción de la sede rondaría los 3 millones de euros.

Los arquitectos que han diseñado la futura sede, Ángel Ganivet y Juan Carlos Sánchez, ya están trabajando en el proyecto de ejecución, con la intención de que se cumplan las previsiones y las obras comiencen en el primer trimestre de 2022. El plazo para su construcción se estima en dos años, por lo que si no surgen contratiempos, el edificio estará acabado en la primavera de 2024.

No ha sido un camino de rosas llegar a este punto. La Fundación CB convocó, en colaboración con el Colegio Oficial de Arquitectos de Extremadura (Coade) un concurso de ideas para el diseño del edificio que será su buque insignia a finales del 2018, tras comprar el solar a la Inmobiliaria Municipal. En mayo de 2019, se presentó el proyecto ganador y poco después se entregó el estudio de detalle y actuación singular al ayuntamiento. El proyecto no se adaptaba al Plan Especial del Centro Histórico e inicialmente se planteó una modificación puntual de este último. Pero pasaron los meses sin que hubiera avances, ante lo que la entidad incluso llegó a lanzar un ultimatum y se mostró dispuesta a renunciar a sus planes. 

 Al final, en noviembre de ese año, por decreto de alcaldía, no se aprobó inicialmente el estudio de detalle y fue el proyecto el que se tuvo que adaptar al plan. Supuso un revés que obligó a introducir cambios en el diseño del edificio, que no afectaron al programa de necesidades, y a recalcular los plazos de esta actuación. Hasta agosto de 2020, no se recibió el visto bueno del ayuntamiento, al que siguió el de Patrimonio. Entonces la idea era que las obras pudieran comenzar a principios del 2021, pero, de nuevo, los trámites administrativos han hecho que se aplace un año más. 

Ya con el visto bueno al proyecto básico sobre la mesa, solo queda presentar el de ejecución para obtener la licencia de obras, por lo que la Fundación CB puede volver a poner en marcha el contador para que su ansiada sede, que pretende ser un acicate para la rehabilitación y revitalización del Casco Antiguo, sea realidad.

El edificio diseñado por Ganivet y Sánchez es «sobrio, versátil, moderno y clásico a la vez» y se integra en el entorno, en el que no se impone, sino que dialoga con el resto de los inmuebles que hay alrededor, según definieron los arquitectos cuando lo presentaron. Además de la nueva sede, el concurso de ideas incluía un proyecto de reforma de la plaza de Santa María, para la que proponen la eliminación de las escalinatas más próximas a la calle Montesinos, para que se sustituyan por una loma verde con árboles, junto a la que se plantea un quiosco de bebidas de tipo «romántico», dejando el resto de la plaza libre para distintos usos. Además, la anchura de la calle paralela a la iglesia de Santa Catalina se duplicaría para convertirla en un bulevar con árboles que den sombra a la zona. Esta propuesta se ha trasladado al ayuntamiento, que correría con su financiación y ejecución.