Suerte de Saavedra es uno de los barrios de Badajoz con más afición por la petanca. Llegó a tener tres clubes, aunque ahora solo hay uno en activo, La Encina. Las pistas para practicar este deporte se habilitaron hace cerca de dos décadas, pero cayeron en el abandono y fueron los miembros de la asociación vecinal, con sus propias manos y medios, los que las recuperaron hace cuatro años. 

Tras la muerte de Antonio Escudero, uno de los vecinos que más luchó para que el barrio tuviera un centro de mayores, se decidió dar su nombre a un torneo de petanca. Su primera edición se celebró en el 2019, pero el año pasado, a causa de la pandemia, no se pudo llevar a cabo. Ayer, coincidiendo con el Día de Extremadura y el inicio de la semana cultural de Suerte de Saavedra, se celebró por segunda vez, con más de medio centenar de participantes, muchos de ellos de la barriada, pero otros procedentes de distintos puntos de la región. 

«Echábamos de menos el sonido de las bolas», reconocía Juan Manuel Sánchez, uno de los jugadores. Los aficionados echaron mucho de menos practicar este deporte durante los meses del confinamiento y a algunos, a pesar de ser al aire libre, les ha costado volver a coger las bolas por temor a los contagios. Con la vacunación, la práctica se ha retomado y no es raro ver a grupos de vecinos en las pistas de petanca a diario y durante los fines de semana. No solo se trata de jugar, pues este espacio se ha convertido en punto de encuentro en la barriada. 

La asociación vecinal quiere seguir fomentando su práctica entre los adultos y también atraer a los niños para hacer cantera, para que Suerte de Saavedra siga siendo territorio de petanca.

No es la única actividad de la semana cultural. Para mañana (19.00 horas) habrá una charla sobre huertos urbanos y un espectáculo de flamenco (22.00 horas) y el sábado, si las autoridades sanitarias la autorizan, se celebrará una fiesta de la espuma para los niños. El primer día, los vecinos recibieron la visita del portavoz municipal socialista, Ricardo Cabezas, y las concejalas de su grupo Rita Ortega y Candy Arce.

A pesar de la oferta lúdica, la asociación de vecinos no se olvida de sus reivindicaciones durante la semana cultural, por eso ayer no dudaron en volver a sacar a la calle dos pancartas con las demandas que aún siguen pendientes: el centro de mayores y el centro de ocio y deportivo. No será esta la última vez que recuerden al ayuntamiento que son compromisos todavía incumplidos.

Una pancarta para reivindicar el centro deportivo y de ocio. ANDRÉS RODRÍGUEZ