La Delegación del Gobierno en Extremadura ha trasladado ya al Ayuntamiento de Badajoz que el Estado no entrará como miembro del futuro Consorcio del Casco Antiguo, aunque sí aportará fondos a los proyectos que desarrolle, compromiso que tanto el consistorio como los colectivos de la zona esperan que se cumpla en aras a que el proyecto sea una pronta realidad.
El alcalde de Badajoz, Ignacio Gragera, dijo ayer a Efe que le hubiera gustado que el Gobierno «tuviera participación como miembro del consorcio, pero lo más importante es que esta iniciativa sea una realidad, y si debemos ser tres (ayuntamiento, Junta de Extremadura y Diputación de Badajoz) con el apoyo externo del Ejecutivo central, bienvenido sea».
Como trasladó la delegada del Gobierno en Extremadura, Yolanda García Seco, al alcalde pacense durante la reunión mantenida el pasado jueves, el compromiso del Estado es participar financieramente en los proyectos que se presenten, aunque no como socio de pleno derecho del consorcio. Según se manifestó, el Estado no suele integrarse en consorcios, con excepción de aquellos que tienen un objeto muy detallado. En el caso de Badajoz, el objetivo es impulsar la regeneración del barrio, además de la recuperación del patrimonio.
El presidente de la Asociación SOS Casco Antiguo, Luis Pacheco, coincide, a su vez, en que el objetivo del consorcio debe ir mucho más allá de la recuperación del patrimonio, ya de por sí «muy importante», pero destaca que «son necesarias muchas cosas más».
En este sentido, recuerda que el Casco Antiguo «más extenso de Extremadura» adolece de dotaciones como un centro cívico, instalaciones deportivas, guarderías o aparcamientos, y precisa de una mayor seguridad que acabe con el trapicheo de droga y con otras conductas incívicas.
